Siempre es muy interesante escuchar a Roberto de la Mota y degustar sus vinos, porque como pocos enólogos argentinos puede trasmitir con simpleza tanto. Ya que además de sus conocimientos y experiencia, todo lo combina con las anécdotas y enseñanzas que le dejó su padre, Don Raúl; considerado el padre de la vitivinicultura argentina.

Pero esta vez el encuentro fue diferente.

Como siempre, distendido y amable, en Bis; el nuevo restaurante de Gonzalo Aramburu en el Pasaje del Correo; cuando empezaba a caer la noche.

Como nunca, degustando comparativamente los vinos que hace en Mendel y en Revancha, su proyecto familiar. Porque si bien en los últimos años siempre sus vinos de ambas bodegas fueron de la mano, fue la primera vez que Roberto los cuenta juntos, y así fue mucho más claro ver, no solo sus diferencias, sino entender el estilo y las intenciones de cada una de sus etiquetas.

Claro que su espíritu docente lo obligó a comenzar hablando de lo que fue la cosecha 2018, y una vez más dejó bien en claro por qué es una de las personas más buscadas y respetadas de la industria.

Cómo fue la cosecha 2018 según Roberto de la Mota

Teniendo en cuenta los vinos a degustar, comenzó aclarando que el 2015 fue un año menos cálido que el 2014, pero no tan fresco como el 2013, y menos que el 2016, para brindar a los presentes un contexto.
A Roberto le gustó mucho la cosecha 2018, y si bien al final del ciclo empezó a llover mucho, y los Cabernet Sauvignon de mayor vigor sufrieron, en su caso particular y por su manejo de las viñas, salió todo muy bien.
El 2016 fue un año muy lluvioso. En Altamira cayeron 766 mm entre la brotación y la cosecha; el triple de lluvia que un año normal. Pero no hubo mucha botrytis porque hizo mucho frío, y gracias a ello no se propagó la podredumbre. Además, con un buen manejo de canopia y de riego, aireando las uvas, se logró una buena sanidad, pero vinos muy diferentes, con menos estructura, concentración y volumen. Pero elegantes, con mucha fruta, buena acidez, largo de boca, y que seguramente van a evolucionar muy bien en el tiempo; comparables a los de 2001, 2005, 2006 y 2010; según el hacedor.

Sin dudas, la 2016 fue la cosecha de menor volumen de los últimos 30 años, y esa poca producción elevó mucho el precio de uva.
El 2017 también fue lluvioso, aunque no tanto. En la misma finca de Altamira cayeron 480 mm, el doble que lo normal. Pero fue un año excelente en calidad, con buena concertación, mucho color y poca cantidad de uva; más que en 2016 pero escaso.
Así, el 2018 comenzó con una brotación muy buena, con mucha uva en floración, pero hubo una helada en primavera que afectó a varias zonas, más en Lujan alto que en el Valle de Uco, y especialmente al Malbec en Las Compuertas, Vistalba, Perdriel, Agrelo y Ugarteche. No obstante, la calidad fue muy buena y la cantidad se recuperó un poco, llegando a los 25.7 millones de quintales según el INV (Instituto Nacional de Vitivinicultura), aunque lejos de los 28 millones de 2013.
Pero pasó algo raro que marcará este año; el ciclo de madurez fisiológica fue más temprano en zonas frías que en zonas cálidas. Es decir que en Altamira las uvas maduraron más rápido que las de Lujan de Cuyo (Mayor Drummond y Perdriel). “Y por primera vez este año cosechamos primero el Valle de Uco”, aclaró el enólogo. Además, el 25 de Marzo hubo otra helada, que por suerte no afectó ni cantidad ni calidad porque ya estaba cerrado el ciclo de la planta, pero sí el follaje quedó chamuscado, y muchos salieron a cosechar rápido. Porque si esas hojas secas se pegan a los racimos y luego caen y se mezclan con las uvas en cosecha, dañan el vino. Por eso la mayoría cosechó antes y las bodegas se llenaron antes de lo planeado.
Roberto está muy contento con los blancos 2018, pero más con los tintos, que tienen mucho color y taninos; solo tuvo que ser precavido en las maceraciones para no extraer de más.

Degustación comparativa Mendel & Revancha

Lo interesante de degustar su Mendel Semillón y su Revancha Chenin fue comprobar que las diferencias no estaban en el estilo, sino en las características de las uvas y de los terruños.

En ambos vinos las uvas son prensadas enteras y el 85% del jugo fermenta en tanques de acero inoxidable, mientras que el resto lo hace en barricas nuevas; siempre de roble francés. Ese proceso de fermentación y crianza en barricas precisa un tiempo con sus borras de al menos seis meses, aclara Roberto.
En viñedo, el Semillón es verde clarito, casi amarillento, de racimo mediano y granos grandes, de piel fina. El Chenin Blanc tiene una hoja similar a la del Sauvignon Blanc, de racimo y granos chicos, con un ala grande.
Mientras el Semillón da vinos con notas de flor de acacia y frutos secos, evolucionando a las avellanas, el Chenin Blanc es más floral, y cuando madura ofrece algo de frutas tropicales, explicó el experto.

El Mendel Semillón empieza en 2009, y la uva viene de Altamira, mientras que el Chenin es de Agrelo. En ambos vinos se preserva el málico y evolucionan muy bien, aseguró el winemaker.

Como primera conclusión de la degustación comparativa me quedo con la austeridad y el potencial del Semillón, porque si bien hay similitud en el estilo con el Chenin, se lo nota más vino.

Los Malbec jóvenes son bien diferentes, ya que no solo se nota la diferencia de terruños entre ellos, sino que además las intenciones (y los volúmenes) son diferentes. Mientras el Lunta ya encontró su lugar en el mundo y debe responder a sus seguidores, el Peón Revancha se va haciendo camino al andar. El primero es un Malbec joven y elocuente de Luján de Cuyo. El segundo es un vino más serio, con taninos firmes y un agarre más propio de un vino de guarda que de uno listo para disfrutar.

El Mendel se hace con uvas de Drummond y se cría el 100% en barricas de uno a tres usos, aunque este año predominan las de segundo uso por como se desarrolló el Malbec. Por su parte, el Primera Revancha es elabora de manera muy similar, aunque con un toque de Cabernet Franc, y siempre con uvas del Valle de Uco. Tanto cree en este cepaje Roberto que este año van a lanzar un varietal 100%, aunque no está definido con cuál etiqueta. Este Cabernet Franc proviene de Altamira y de la muestra de barrica degustada se notó un vino de aromas integrados, algo apretado y joven, con notas de frutos rojos y negros, y suaves dejos herbales. De paladar bien integrado, con volumen y carnosidad, buen cuerpo y equilibrio. Muy interesante, aunque más Revancha que Mendel, por su estilo, más allá de la influencia del terruño.

Otra de las novedades que deslizó el enólogo durante la degustación fue que hacen un Malbec orgánico con las uvas que rodean la bodega. También tienen en la gatera, y con muchas ganas de sacar, un Mendel Merlot 2017. El problema del Merlot, más allá de sus dificultades para ser vendido, es que sus estomas tienen poca agilidad para abrir y cerrase (como el Syrah), entonces en climas cálidos se marchita con el calor y es susceptible al stress hídrico, y por ende se hace difícil encontrarle un punto de cosecha ideal.

Con el Mendel Unus en las copas, Roberto contó que plantaron en Altamira Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Petit Verdot y Semillón, pero recién este año esos tintos se podrán usar. Mientras el Unus ya se consagró como uno de los mejores tintos nacionales, con su equilibrio, La Gran Revancha (desde 2009) parece seguirle los pasos, con la misma seriedad en el paladar pero un paso más vertical, aunque esto no signifique que sea más moderno. Es más, hay un gran clasicismo actual en los vinos de autor de Roberto que se nota más a medida que sube la apuesta cada etiqueta. Quizás lo que marca la diferencia no es una necesidad de Roberto de hacer algo diferente en Revancha para despegarse de Mendel, sino el origen de las uvas y, a veces, la incorporación de pequeños porcentajes de otras variedades para lograr texturas diferentes. Pero en punto de madurez, elaboración y crianza se notan que están cortados por la misma tijera. Y si se mira con lupa dentro de las copas quizás se podrá apreciar que los Mendel son elegantes, y a los Revancha se le suma la potencia. Vinos diferentes de un gran hacedor argentino que hace tiempo está escribiendo su propia historia. Vinos que, seguramente, en algunas décadas muchos van a disfrutar como hoy se disfrutan los afamados vinos guardados de Weinert, también con el sello inconfundible de la Mota.

Los vinos de Roberto de la Mota

 

Mendel Semillón 2017

Bodega Mendel, Altamira, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $420)
Blanco de buen volumen y austeridad, con tipicidad y más músculo que en versiones anteriores. Paladar franco, con cuerpo y buen potencial. Hay un amargor final delicado y cierta profundidad, con madurez y un paso más graso, aunque menos refrescante que el 2016, pero a su vez más completo y con la madera sumamente integrada. Es decir que se nota el efecto de la cosecha. Además, tiene esas notas de miel y pasto seco, con algo de copos de maíz, que es inconfundible del varietal; y la estiba lo va acomodando muy bien. Tiene todo para lucirse en la mesa. Beber entre 2018 y 2020.

Puntos: 91

 

La Primera Revancha Chenin Blanc 2017

By Roberto de la Mota, Agrelo, Luján de Cuyo

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $360)
De buen cuerpo y un carácter algo maduro en el final de boca, con notas de manzana asada. Buen volumen y aromas densos, limpios y frutales, aunque no tan definidos. Hay cierta potencia pero equilibrada con vivacidad y un paso agradable. Ha ganado armonía en sus expresiones respecto del tenso y maduro 2016. Decantarlo o esperarlo en la copa le hará bien para desplegar todos sus atributos. Beber entre 2018 y 2019.

Puntos: 89

 

Lunta Malbec 2016

Bodega Mendel, Mayor Drummond, Luján de Cuyo

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $340)

Malbec joven de aromas evidentes y vibrantes, con fruta roja y especias. Buen cuerpo, con taninos algo firmes y leves tonos lácticos. Notas vegetales y un trago ágil sin mucha profundidad. Bien apoyado en su carácter especiado, resulta fresco y agradable, con texturas ideales para acompañar carnes rojas a la parrilla.

Puntos: 88,5

 

Revancha Malbec 2016

By Roberto de la Mota, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $320)

Combinando uvas de Altamira y La Consulta, y con un toque de Cabernet Franc (5%), se logra este Malbec de aromas intensos y compactos, propios de un vino joven. De buen cuerpo y paso refrescante, con taninos algo firmes que se agarran bien, y una profundidad especiada. Es un vino serio y con buen potencial. Beber entre 2018 y 2021.
Puntos: 90

 

Mendel Malbec 2016

Bodega Mendel, Mayor Drummond, Luján de Cuyo

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $540)
Tinto de aromas equilibrados con cierta fineza frutal. De buen carácter y muy agradable fluidez, con dejos herbales y taninos incipientes que aportan texturas delicadas. Franco y de final fresco, con algo de frutas negras, paladar jugoso y de buen volumen. Beber entre 2018 y 2020.

Puntos: 90,5

 

La Primera Revancha Malbec 2016

By Roberto de la Mota, Altamira, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $480)

Otra vez el enólogo utiliza un poco de Cabernet Franc (7%) para darle más agarre al Malbec. De acidez marcada y paladar poco profundo, con buen agarre, algo más firme y serio. Con un carácter frutal propio y muy buena frescura, con un toque herbal seco que aparece sobre el final de boca. Beber entre 2018 y 2022.
Puntos: 91,5

 

Mendel Cabernet Sauvignon 2016

Bodega Mendel, Perdriel, Luján de Cuyo

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $540)
De aromas densos, con buen cuerpo. Carnoso y con taninos bien agarrados, algo classy en su carácter pero con fuerza actual. Láctico y jugoso, con fruta roja algo madura y leves dejos especiados sobre el final de boca. De buen volumen y con potencial. Beber entre 2018 y 2021.
Puntos: 90,5

 

Mendel Unus 2015

Bodega Mendel, Luján de Cuyo

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $860)
Blend de Malbec (65%), Cabernet Sauvignon (25%) y Petit Verdot (10%). El Malbec es una mezcla de los tres viñedos que posee la bodega, el Cabernet es todo de Perdriel, y el Petit Verdot de Drummond. De aromas elegantes e integrados, con notas de frutos negros y algo especias (orégano, comino, etc.). Complejo, con buen cuerpo y fluidez, taninos firmes pero equilibrados y un final profundo con toques maduros. Beber entre 2018 y 2022.

Puntos: 92,5

 

La Gran Revancha 2015

By Roberto de la Mota, Altamira, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $760)
Blend de cuatro cepas: Malbec (50%), Cabernet Sauvignon (25%), Cabernet Franc (15%) y Petit Verdot (10%). De aromas densos y frutales, algo classy en sus expresiones pero con fuerza. De buen cuerpo y volumen, con taninos incipientes, algo firmes pero finos. Con leves ahumados finales, y dominado por una madurez buscada. Buen potencial de guarda dentro de su propio estilo. Beber entre 2018 y 2023.
Puntos: 92

 

Mendel Finca Remota 2015

Bodega Mendel, Altamira, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ (Abr2018 $1800)
Un Malbec con todas las letras y sello propio desde que nació. De buen músculo, un carácter de frutas negras y ciertos dejos herbales y algo de regaliz. Paladar franco y buen cuerpo, con taninos firmes pero amables, y cierta madurez de fruta. Muy compacto en su final de boca más allá de su ataque fluido, signo que recién está empezando a nacer y goza de gran potencial. Beber entre 2018 y 2025.
Puntos: 93

 

 

Sobre El Autor

Hace 22 años degusté un vino por primera vez y supe que querría hacer de mi vida profesional. Compartir mi pasión; por eso me dediqué a comunicar el vino. Más de 30.000 vinos degustados y 20.000 publicados, más de 100 revistas editadas y miles de notas. Siete años en TV, cuatro en radio y seis en la web. Más de 20 exposiciones de vino organizadas y más de 30 concursos internacionales como jurado, además de muchos viajes a zonas vitivinícolas del mundo. Todo esto, simplemente me ayuda a conocer más, para poder compartirlo mejor.