Para muchos, todo lo que rodea al vino es joda. Sin embargo, no siempre las degustaciones de vinos son divertidas. Solo a los profesionales (enólogos, agrónomos, periodistas, sommeliers, chefs y restauranteurs, entre otros) que aman su trabajo, los entretienen las largas catas, ya sean en bodegas, concursos, presentaciones, etc. Es que apreciar con todos los sentidos muchos vinos es algo cansador, y en cierto modo, monótono. Si bien cada vino es diferente, la metodología es (o debería ser) la misma: mirar el vino, olerlo, escribir, tomar un sorbo, sentirlo y pensarlo, escupir, volver a escribir, oler de nuevo, beber otro sorbo, pasearlo por todo el paladar, escupir, seguir escribiendo. Y así hasta que el vino esté totalmente definido, descripto, apreciado y/o calificado, según la ocasión. La misión es grabarse cada vino en ese preciso momento en la mente (disco rígido personal), y escribir ayuda mucho a eso. Algunos optan por quedarse con un registro más allá de la planilla de ocasión a completar y entregar. Hacer eso más de diez veces, ya es cansador. Y en algunas ocasiones esa tarea llega hasta los 200 vinos. Es cierto que el disfrute de los consumidores dista mucho del de los profesionales. Pero a veces eso se confunde, y se somete a consumidores y a amantes del vino a degustar decenas de vinos, creyendo que en la cantidad está el mayor disfrute.

Claro que a cualquiera que guste del vino y no lo haya hecho con anterioridad, tener la posibilidad que le sirvan muchos vinos en un mismo lugar para degustarlos es tentador. Y más si es con comida, rodeado de otros enófilos y, mejor, con algunos profesionales. Pero más de 50 vinos es una exageración para todo aquel que no esté acostumbrado.

A lo largo de mis 20 años de carrera profesional he participado en cientos de eventos donde el vino es protagonista, organizados por profesionales o por aficionados. Y si bien siempre los disfruto; porque valoro mucho degustar un vino por más que ya lo conozca, porque siempre es una nueva degustación; pocas veces salgo sorprendido con la propuesta, más allá de los vinos descorchados.

Gran sorpresa me llevé el mes pasado en TrientaSillas, el restaurante a puertas cerradas del cocinero Ezequiel Gallardo, al participar de la cuarta edición del #10yearswinechallenge. Un evento que solo seguía a través de las redes y que involucra a 10 bodegas, 20 vinos, 30 sillas. El lugar es óptimo para ello, porque no es abierto al público, y, por lo tanto, todos los asistentes llegan para lo mismo. Un restaurante muy bien puesto con todo lo necesario para disfrutar de los vinos, con copas adecuadas y servidos profesionalmente a la temperatura ideal.

La idea original pertenece a los otros dos protagonistas, Teresa García Santillán (Project Manager Club Bonvivir) y Joe Fernández (astrólogo, cantautor, empresario, escritor, y comunicador de vinos).

En #10yearswinechallenge se degustan dos cosechas diferentes de diez vinos de distintas bodegas. Y si bien es muy interesante ver la evolución del mismo vino en una década, lo más importante es el disfrute de los asistentes. La conducción del evento es amena, entretenida y amigable, casi personal, ya que el lugar no es muy grande. Teresa y Joe no necesitan utilizar micrófono para presentar cada vino. La gente se prende con cada ocurrencia de Joe (sobre todo el público femenino), y se anima a opinar en voz alta, porque todos ahí saben que van a disfrutar, a entretenerse y, en el mejor de los casos, también a aprender.

Tuve la suerte de tener en mi mesa a Marcelo Pelleriti, y un poco más allá a Arnaldo Etchart (h), responsables de cuatro de los vinos de la noche, que enriquecieron con anécdotas y explicaciones la charla. Sus aportes fueron claves para entender que en esos vinos (y en general en todos los vinos argentinos) la diferencia entre cosechas no es solo una cuestión de paso del tiempo y clima de la añada, sino también de cambios en el manejo de los viñedos y en la elaboración, que muchas veces tuercen un poco el estilo original para mantenerse actuales. Marcelo fue muy claro al recordar que el Viejo Mundo tiene la experiencia, y nosotros llevamos pocos años elaborando vinos de calidad, ya que en los 90´nadie sabía que era la enología moderna. Además, la Argentina llegó a tener 70.000 has de Malbec, de las cuales solo quedaron 5000 en los noventa.

Claro que con cada vino Ezequiel se lució con una variada propuesta de finger food que venía muy bien para cambiar el gusto antes del próximo par de vinos. Y más allá que yo nunca como durante una degustación, a mi alrededor eran tan celebrados como las copas de desfilaban por las mesas.

Es cierto que a medida que pasan los vinos la gente se suelta más, sin que ello signifique que pierdan sus estribos. Por el contrario, si bien los spitters ni se ensuciaron, el vino les daba confianza para soltar sus sensaciones y compartirlas en voz alta, más allá de sus compañeros de mesa.

Una experiencia vínica muy recomendable, y para tener en cuenta. Habrá que estar atentos al hashtag en las redes #10yearswinechallenge para asegurarse un lugar en la próxima edición, que será en agosto.

Los vinos del #10yearswinechallenge

Vino 1

Séptima Gran Reserva 2006

De aromas maduros y buena frescura, classy, con algo de cuero. De ataque jugoso, pero paso algo secante, con dejos especiados, y un final muy de barrica americana, demostrando que su mejor momento ya pasó. Está para descorchar.

Nota: Marcelo Pelleriti recordó que se trató de un año con un otoño muy cálido y eso marcó la cosecha

Vino 2

Séptima Gran Reserva 2016

Fresco y agradable, de paladar equilibrado, con buena fruta y la madera bien integrada. Con buena fluidez y poco profundo, con notas de fruta negra y especias, y taninos algo firmes que sobresalen en el final de boca. Descorchar o guardar al menos hasta 2020.

Nota: El enólogo de Monteviejo recordó a los asistentes las dificultades del año que presentó El Niño con las lluvias.

Vino 3

Angélica Zapata Cabernet Sauvignon 2005

De aromas terrosos y húmedos, paladar fresco y especiado, con taninos que aún marcan su paso por boca. Hay un carácter complejo de frutas maduras y dejos ahumados que asoman sobre el final cálido. Un vino que mantiene su personalidad a pesar del paso de los años. Descorchar o guardar al menos hasta 2020.

Nota: Para Marcelo Pelleriti es uno de los mejores años para guardar vinos. Fue una cosecha de estaciones muy marcadas y en la que los Cabernet se cosecharon tarde.

Vino 4

Angélica Zapata Cabernet Sauvignon 2015

Aromas bien apoyados en las frutas negras y las especias. Expresivo y con buena fluidez, de paladar franco y moderno, amable y refrescante a la vez, con taninos que se mantienen firmes pero finos. La estiba le va a venir bien para que se acomode mejor y empiece a soltar su complejidad. Descorchar o guardar al menos hasta 2025.

Nota: Pelleriti destacó que se trató de otro año complicado por lo lluvioso.

Vino 5

Yacochuya 2006

De aromas densos y algo cálidos, con buena fruta roja y frescura con potencia alcohólica. Dejos de acetona con algo confitado propio de la evolución, pero bien llevado. Con fuerza y potencial dentro de su estilo, cargado, carnoso y fresco, y un final que se mantiene firme por sus taninos. Está para descorchar.

Nota: Arnaldo, recordó a los dos hombres que crearon este vino hace 20 años, y cambiaron la manera de pensar la vitivinicultura: su padre Arnaldo Etchart y Miche Rolland.

Vino 6

Yacochuya 2016

Muy fluido y con dejos herbales, directo y con algo salvaje, paladar jugoso, y con texturas firmes. De trago amable, aunque se lo siente todavía joven, y poco profundo. Con más frescura y equilibrio que en otras añadas. Guardar al menos hasta 2020 para que gane equilibrio.

Nota: Arnaldo Etchart (h) destacó que desde 1999 el clima es parejo, y que solo tuvieron dos años difíciles; 2011 y el 2012, que no se pudo hacer este vino, que siempre tuvo al mismo enólogo con la misma elaboración.

Vino 7

Nina Petit Verdot 2005

Tinto concentrado pero domado por el paso del tiempo, cargado de frutas maduras y las notas de crianza que dominan el final de boca. De carácter especiado y maduro, con os taninos que mantienen estructura, pero ya sin tanta expresión. Descorchar.  

Vino 8

Nina Petit Verdot 2015

Se puede apreciar que es el mismo vino por estilo, pero con mayor fluidez. Bien apoyado en la fruta, con algo de especias, y taninos compactos y firmes. La crianza sobresale en el final persistente. Puede ganar equilibrio en botella. Descorchar o guardar al menos hasta 2021.

Vino 9

Altimus 2005 (Cab. Sauv., Tannat, Bonarda y Syrah)

De aromas maduros y húmedos, paladar consistente, pero algo compacto. Con buena frescura y apoyado en la fruta madura y las especias. Gana la crianza en el final de boca, con dejos de cuero y especias. Un estilo más classy, pero bien llevado. Descorchar.   

Vino 10

Altimus 2015 (Cab. Sauv., Malbec, Merlot y Cabernet Franc)

De aromas poco expresivos pero equilibrados, con buena fluidez y algo de fruta negra. Paso ágil y fresco, con taninos firmes y amables, bien apoyado en la fruta. Solo falta que sus componentes se acomoden más en la botella. Guardar al menos hasta 2020 para que gane equilibrio.

Vino 11

Altocedro Reserva La Consulta Malbec 2004

Sus aromas hablan de una agradable evolución, con notas de frutas pasas, y todavía con buena frescura. De paladar algo compacto y firme, con cuerpo y agarre, y un final de boca poco expresivo. Descorchar.   

Vino 12

Altocedro Reserva La Consulta Malbec 2014

De aromas austeros para ser Malbec y de La Consulta, con buena consistencia, y las notas de crianza (ahumados suaves) que empiezan a querer integrarse al vino. Taninos firmes y final compacto. Esperarlo o servir en decanter para que se abra y suelte sus expresiones. Guardar al menos hasta 2020 para que gane equilibrio.

Vino 13

RJ Malbec 2004

Elaborado con uvas de San Carlos, se perciben aromas bien maduros y de carácter. No muy expresivo en boca, pero se nota su estilo classy y bien logrado, de paladar franco y texturas incipientes, con dejos de crianza en el final de boca. Descorchar.   

Vino 14

RJ Malbec 2014

Si bien se siente un poco más actual en sus aromas, el carácter de la fruta es madura. De trago compacto y buen volumen, taninos firmes y la crianza que comparte el protagonismo en el final de boca. Descorchar o guardar al menos hasta 2021.

Vino 15

Salentein Primus Malbec 2004

Tinto con buen cuerpo, de aromas densos, que remiten al paso del tiempo, con notas cárnicas y especiadas. De paladar compacto, y los taninos que se mantienen firmes. Fue la segunda cosecha de este vino. Descorchar.   

Vino 16

Salentein Primus Malbec 2014

Aromas a frutas negras y frescura con fluidez, expresivo y joven con potencial, buen cuerpo y texturas finas, con un final ahumado. Se nota acá el carácter del Valle de Uco, y el cambio que propone la nueva búsqueda de José Pepe Galante. Descorchar o guardar al menos hasta 2021.

Vino 17

Lindaflor Malbec 2002

De aromas densos y compactos, con buena frescura y fluidez, buen cuerpo, con agarre y cierta evolución. Se nota el estilo y la mano de Marcelo Pelleriti, y sorprende manteniendo un ataque fresco, que equilibra bien su fuerza y su final potente. Descorchar o guardar al menos hasta 2021.

Nota: Cuenta el enólogo que fue la primera cosecha de Lindaflor. Un año raro, corralito de por medio, una incógnita, de bajos rendimientos por viñedos jóvenes y vinificación a la francesa. 

Vino 18

Lindaflor Malbec 2012

Aromas intensos a frutas a negras, paladar compacto, con agarre tenso y paso denso pero armónico. Se percibe un ahumado integrado, con gran carácter de frutas negras, hay frescura y un trago consistente, con un estilo bien definido y un interesante potencial. Descorchar o guardar al menos hasta 2025.

El 2012 fue año particular, ya que, por culpa del granizo de fines de 2011, perdieron gran parte de la producción.

Nota: El 2012 fue año particular, ya que, por culpa del granizo de fines de 2011, perdieron gran parte de la producción.

Vino 19

Le Elisir D´Amore 2003

Si bien esta cosecha tardía refleja el paso del tiempo, pro sus aromas licorosos y tostados, y paladar franco, mantiene su frescura intacta. De paso denso y final persistente. Descorchar.

Vino 20

Le Elisir D´Amore 2013

De aromas expresivos, a frutas blancas y tropicales, con dejos de frutos secos. Paladar franco y fresco, untuoso y agradable, con un final tostado amable del paso por barricas. Descorchar o guardar al menos hasta 2022.

PODIO FP

  1. Salentein Primus
  2. Lindaflor Malbec
  3. Yacochuya

#10YearsWineChallenge, la cata de vinos añejos más importante del país

Degustar vinos añejos es una fantasía que todo amante del vino sueña cumplir al menos una vez en la vida. Sin embargo, es sabido que descorchar grandes vinos de cosechas agotadas no es una posibilidad al alcance de cualquiera.

Hasta no hace mucho este fetiche parecía exclusivo de quienes tenían la posibilidad de atesorar botellas durante unos cuantos años, un gusto que muy pocos pueden darse. Pero desde el 26 de febrero esto ha cambiado en Buenos Aires. Cumplir el sueño de conocer los aromas de un Malbec con más de 15 años en botella o de un Petit Verdot de 2005 ya no son un gusto imposible de darse. Basta participar de una de las degustaciones del #10YearsWineChallenge para entrar al túnel del tiempo del vino y además disfrutar de una experiencia única.

Qué es el #10YearsWineChallenge 

El objetivo de este encuentro es experimentar el efecto del tiempo en una misma etiqueta de vino en dos cosechas entre la cuales debía haber exactamente 10 años de diferencia. “El vino sigue vivo y respira dentro de la botella. Esta experiencia surge de la curiosidad de saber compartir qué efecto tiene el tiempo en sus aromas y sabores luego de una década”, comentan Tere García Santillán y Joe Fernández, los creadores de esta iniciativa.

Treinta amantes del vino fueron los que tuvieron la oportunidad de participar de esta edición de #10YearsWineChallenge, en la que cada uno de los presentes se sorprendió del efecto que el clima, el terruño, las variedades involucradas, la tecnología, el enólogo y el paso del tiempo tienen en una copa de vino.

Fueron 10 las bodegas que presentaron dos cosechas diferentes de una misma etiqueta. La cata comenzó con los pares de vinos más jóvenes y concluyó con los más añejos además de ser maridada con quesos de Cabañas Piedras Blancas, Arrivata y un tapeo elaborado por Treintasillas.

“Este desafío demuestra la capacidad de nuestro país de elaborar vinos de excelencia y con gran potencial de guarda. En cada bodega nos detuvimos no sólo a contar acerca de cada vino y su cosecha, sino a escuchar a los amantes del vino presentes expresarse y comentar qué les generaba cada sorbo”, explican Tere y Joe.

Line Up 4ta Edición – martes 4 de junio 2019

  1. Bodega SEPTIMA                 @bodegaseptima
    1.  Séptima Gran Reserva 2016
    1.  Séptima Gran Reserva 2006
  2. Bodega Catena Zapata      @catenawines
    1.  Angélica Zapata Cabernet Sauvignon 2015
    1.  Angélica Zapata Cabernet Sauvingon 2005
  3. Bodega Yacochuya             @bodegayacochuya
    1.  Yacochuya 2016
    1.  Yacochuya 2006
  4. Bodega San Huberto          @bodegas_sanhuberto
    1.  Nina Gran Petit Verdot 2015
    1.  Nina Gran Petit Verdot 2005
  5. Bodega El Esteco                 @bodegaelesteco
    1. Altimus 2015
    1. Altimus 2005
  6. Bodega Altocedro                @Karim_mussi
    1. Altocedro Malbec Reserva 2014
    1. Altocedro Malbec Reserva 2004
  7. Bodega R.J. Viñedos           @rjvinedos
    1.  RJ Malbec Family Wine 2014
    1.  RJ Malbec Family Wine 2004
  8. Bodega Salentein                @salenteinbodega
    1. Primus 2014
    1. Primus 2004
  9. Bodega Monteviejo            @bodegamonteviejo
    1. Lindaflor  2012
    1. Lindaflor  2002
  10. Bodegas Bianchi                   @bodegasbianchi
    1.  Le Elisir D’Amore 2013
    1. Le Elisir D’Amore 2003

Sobre El Autor

Hace 22 años degusté un vino por primera vez y supe que querría hacer de mi vida profesional. Compartir mi pasión; por eso me dediqué a comunicar el vino. Más de 30.000 vinos degustados y 20.000 publicados, más de 100 revistas editadas y miles de notas. Siete años en TV, cuatro en radio y seis en la web. Más de 20 exposiciones de vino organizadas y más de 30 concursos internacionales como jurado, además de muchos viajes a zonas vitivinícolas del mundo. Todo esto, simplemente me ayuda a conocer más, para poder compartirlo mejor.