Al pie de la icónica Biblioteca Nacional surge un moderno oasis urbano llamado Invernadero. El primer restaurante y bar de gin tonic tirado del país invita a desconectarse del ritmo incesante de la ciudad y a disfrutar de sus distintivos cócteles y tapas a la sombra de la cultura.

El lugar propone a sus visitantes conectarse con la naturaleza en su amplia terraza, junto a la Plaza del Lector, en cualquier momento del día. Ya sea para disfrutar de un brunch al sol, de un café y un buen libro al caer la tarde, o de uno -o unos cuantos- gin tonics con amigos después del trabajo, Invernadero invita a tomarse una pausa del ruido de la ajetreada Buenos Aires.

El diseño del espacio se alinea con las formas y los materiales característicos del emblemático edificio de la Biblioteca Nacional, diseñado por los arquitectos Clorindo Testa, Francisco Bullrich y Alicia Cazzaniga en 1961. Su línea brutalista, de hormigón a la vista y  acero, contrasta con la diversidad botánica de los alrededores, haciendo de Invernadero un verdadero refugio urbano. 

Invernadero utiliza un gin elaborado exclusivamente para el bar para acompañarse con su propia tónica artesanal. El gin tonic se encuentra almacenado en barriles y se sirve a través de canillas en copones con hielo y variedad de toppings de hierbas, frutos y pétalos de flores. Acorde con la Biblioteca, los cócteles llevan nombres literarios, como Casa tomada (con pétalos de rosa y pepino), El Sur (con yerba mate y eucalipto), Ocampo (con maracuyá y anís estrellado quemado), El Cuervo (con jengibre y romero quemado) y La Mala Hora (con tintura de lavanda y hojas de coca). Además de esta bebida, la barra ofrece tragos clásicos reversionados, como el old fashioned y el mojito.

La propuesta gastronómica está centrada en las tapas. Desde croquetas españolas, langostinos en panko crocante, montaditos de hongos y queso brie con mermelada de cebollas, ceviche de salmón y camarones, carpaccio de ojo de bife, mollejas con salsa pico de gallo y tiraditos de pesca blanca con wasabi y ponzu de mandarinas; hay delicias para todos los paladares.

¨La naturaleza avanza. Empuja. Logra hacerse paso. Ante la adversidad, ante el hombre, ante la ciudad, siempre encuentra un camino. Parecería nunca importarle el material, la resistencia, la enorme dificultad. Sin mayores inconvenientes y a su propio tiempo siempre logra surgir. Bienvenidos a Invernadero, un espacio mágico que emerge del cruce absoluto y brutal de la naturaleza con el hombre.¨

INVERNADERO Gin & Tapas

Biblioteca Nacional, Agüero 2502

Lunes, martes y miércoles de 8 a 1 / Jueves a sábados de 8 a 3 / Domingos de 9 a 1 

Reservas: 11 2561 2502

Instagram: @invernadero.bn

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