Toda mesa argentina tiene un Don

Orientada a mantener al consumidor como eje de su propuesta, Bodegas Bianchi continúa reflejando en su comunicación los valores del ser argentino y reforzando el sentido de pertenencia que nos une como sociedad. Así, para su marca icónica “Don Valentín Lacrado” la bodega estrena una nueva campaña bajo el claim “Toda mesa argentina tiene un Don” apelando a la idea de volver a recuperar la mesa compartida y el tan ansiado reencuentro con la familia y amigos de la mano de un vino referente de nuestra identidad.

 “Don Valentín Lacrado es un ícono de nuestro país, un producto que se mantiene inalterable y fresco a pesar de haber transitado por varias generaciones durante más de medio siglo. Una marca y un producto que nos llena de orgullo y que nos representa como sociedad. Es un vino infaltable en nuestras mesas, ya sea con amigos o en familia, donde lo más importante es encontrarnos y conectarnos con quienes más queremos”- analiza Sebastián Neira, Brand Manager de Bodegas Bianchi y agrega: “Don Valentín Lacrado es una marca que representa la autenticidad, esa forma tan nuestra de ser, siempre tan frescos, transparentes, originales y divertidos.” 

Versátil, joven, fresco Don Valentín Lacrado es vino que habla sin vueltas y ofrece una consistente relación precio calidad. Con un sabor único e inalterable, está pensado para quienes buscan disfrutar de lo auténtico y valoran los atributos de una marca cercana, confiable, que representa la identidad de los argentinos. 

 “La idea del comercial toma ese algo tan particular y especial que tienen las mesas argentinas, y a través de ese humor que nos caracteriza, buscamos poner a Don Valentín Lacrado en un lugar más descontracturado y que nos represente mejor. Es un juego muy inteligente entre lo que sería una cata de vinos y una conversación entre amigos o familiares, donde a pesar del humor, las ironías y los reclamos siempre hay, en el fondo, un “te extraño” o un “te quiero”- sintetiza Sebastián Neira. “Esos valores son los que representa Don Valentín Lacrado, un vino ícono de la familia argentina”.