Crece el consumo de vino entre las mujeres Info de Prensa 23/11/2021 Agenda, Bodegas 478 El consumo femenino de vino viene aumentando en forma sostenida y se acerca a las estadísticas de los hombres. Ellas son las principales consumidoras de blancos, rosados, dulces y tintos ligeros. El consumo de vino por parte de las mujeres viene creciendo y esta es una muy buena noticia para la industria. Históricamente, los hombres siempre fueron los principales consumidores de vino, sobre todo de los tintos, con el Malbec y el Cabernet Sauvignon a la cabeza. No obstante, en los últimos 10 años, la tendencia está cambiando y cada vez son más mujeres las que eligen un vino para disfrutar. Y a la hora de hacerlo, no sólo optan por los clásicos, son las principales consumidoras de blancos, rosados y tintos ligeros, tales como Pinot Noir, Criolla, Garnacha etc. Las mujeres se conectan con el vino desde espacios propios, tienen otros códigos y ocasiones de consumo, en comparación con los hombres. Eligen el vino porque lo asocian a momentos de relax, desconexión, romanticismo o encuentro con amigas. “Creo que es oportuno reconocer que hemos podido romper un gran paradigma que tenía la industria: es una categoría con gran impronta masculina pero las mujeres hoy conectamos con el vino de forma distinta, donde no pasa solo por el saber sino también por el sentir y disfrutar del vino y del momento. Con el tiempo hemos ido sumando nuevas formas y espacios de consumo y ampliando nuestras preferencias en cuanto a blancos, rosados y tintos, siendo la tendencia bastante equitativa, a diferencia de los hombres que consumen principalmente tinto. Sin dudas, la presencia de la mujer es relevante dentro del mundo de consumidores del vino”, asegura Agustina Hanna, enóloga de Ruca Malen. Según un estudio realizado por la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) en 2019, la mujer está comenzando a igualar el consumo masculino de vino, con más de un 60% de mujeres que lo eligen. En los hombres el porcentaje es de 73%, lo que demuestra que la brecha se está reduciendo. Este mismo informe, arroja que el 42% de las mujeres prefiere el vino tinto, pero un 29% elige otros como blancos, rosados o dulces. Además, en proporción son más las mujeres que eligen vino, entre otras bebidas en la góndola del supermercado, que los hombres. La investigación muestra que un 51% de mujeres compra mayoritariamente sólo vino, en tanto un 54% de hombres compra mayoritariamente sólo cerveza. Si nos referimos al consumo mixto (vino y cerveza), es el hombre el que compra más (53%) que la mujer (47%). Sin seguir paradigmas y teniendo en cuenta nuevas oportunidades de consumo, cada vez son más las mujeres que se mantienen fieles a este tipo de bebida, que resulta ser el compañero ideal para infinitas ocasiones. Teniendo en cuenta este contexto, donde el mundo del vino está ganando cada vez más adeptos, recomendamos algunos de nuestros destacados, para inspirarse a jugar con las variedades y adentrarse a nuevas etiquetas. Si a tintos nos referimos, Cadus Signature Series Pinot Noir 2019 sorprende tanto en boca como en nariz. Expresa aromas a frutas rojas ácidas y herbales, combinados con notas minerales y terrosas. En boca, tiene una entrada dulce y fluida, con una acidez balanceada. Entrando en el mundo de los blancos, Nieto Senetiner Blend Collection White 2020 se convierte en protagonista. En nariz expresa notas cítricas, hierbas frescas, frutos tropicales y flores blancas. Se trata de un vino fresco e intenso, de final vibrante y jugoso. Dentro de la misma categoría, Ruca Malen Chardonnay 2020 expresa aromas a cítricos y flores blancas. En boca destaca una acidez refrescante y final persistente. Santiago Mayorga, enólogo de Nieto Senetiner y Cadus, comenta: “Personalmente, pienso que el vino genera un ámbito de compartir con uno mismo o con otros. Al disfrutar de esta noble bebida, uno necesita tomarse el tiempo para descorchar y tenerlo a la temperatura adecuada. Respecto del consumo, siento que es súper equitativo en estos tiempos. Recuerdo que, en casa de niño, desde mis hermanas hasta mi abuela tomaban vino. Puedo inferir que el consumo femenino ha evolucionado a incorporar más tipos de vinos.”