Vinos modernos, con el respaldo de la tradición

Hablar de Cadus es hablar también de Nieto Senetiner, no solo porque se trata de la misma bodega y filosofía, sino porque la historia de una dio origen a la otra. Es cierto que, como suele pasar con los vinos exitosos, Cadus pasó de ser la línea de alta gama de Nieto a ser una bodega. Para ello convocaron originalmente a Santiago Mayorga, quien luego se hizo cargo también de la mayoría de los vinos de Nieto Senetiner.

Hoy Cadus es dueña de una impronta propia, y sus vinos comienzan a escribir su historia. Pero no hay que dejar de reconocer que en gran parte es gracias a Nieto Senetiner y su visión. Por un lado, de respetar las tradiciones vitivinícolas, pero también con esa intención de ir a buscar mayor frescura a las zonas más altas de Mendoza. Así llegan al Valle de Uco, con viñedos propios y otros manejados como si lo fueran. Como Viña Vida en Los Chacayes, ese viñedo modelo creado por el reconocido expublicista Oscar Marcovecchio. De allí, con el manejo del agrónomo Ricardo Carretero, el winemaker obtiene diversos Malbec y un Petit Verdot sobresaliente. Pero antes que ellos, la dupla Roberto González y Tommy Huges (enólogo y agrónomo respectivamente) construyeron los cimientos para que Santiago Mayorga pudiera soñar con lograr vinos modernos y de excepción para disfrutar en la mesa, tanto hoy como en algunos años.

Es evidente que el legado de la marca, hoy convertida en bodega, no le impidió al joven winemaker crear vinos modernos, que hablen de lugares y de variedades, pero también de la búsqueda de un estilo tan propio como actual, siempre con el respaldo de la tradición.

Cadus, que significa ánfora en latín y remite a la cultura milenaria de la elaboración de vinos, empezó siendo una sala de barricas donde se reservaban los mejores vinos de Nieto Senetiner. Pero con el tiempo, se despegó como bodega propia, y hoy Nieto tiene sus tops, mientras que Cadus ha desarrollado diferentes líneas, sobre todo desde la llegada de Santiago Mayorga. Actualmente, posee una bodega propia en Vistalba, donde además de las barricas, Santiago cuenta con tanques de inox, huevos de concreto y hasta una tinaja de barro española; “al fin Cadus tiene un ánfora de 1000l” exclama, quien fue armando la pequeña bodega de sus sueños. En esa nueva vasija irá un ícono de lugar (varietal o corte), o la selección de los mejores Malbec de una cosecha; aún está por verse. Allí, Santiago logra plasmar su creatividad, buscando resaltar las características del terruño respetando la influencia del clima, como buen agrónomo. Los diferentes formatos de vinificación le permiten buscar diversos estilos.

Con los varietales de Cadus Appellation ya totalmente posicionados como vinos modernos y expresivos, apoyados en la fruta y con el toque justo de crianza, se lanzó Cadus Signature. Vinos de autor a partir de variedades alternativas (Pinot Noir, Criolla y Petit Verdot, por ejemplo) elaborados también con métodos alternativos, para lograr vinos diferentes, más apoyados en sus texturas y tipicidades varietales. Desde el 2014 que elabora un Chardonnay con tapa a rosca, hoy convertido en un gran exponente blanco de Vista Flores. Esto le permite trazar una línea estilística entre ese y el 2021; “el 2014 era más maduro y algo más mantecoso, seleccionamos madera de borgoña de Beaune. La 2015 fue más fresca, pero usamos la misma madera; 40% de barrica nueva. El 2016 fue un año interesante por ser frío; de suerte llegó a 13 grados, y apareció el carácter de zona fría, aunque tuvimos que lidiar con la lluvia y la podredumbre. El 2017 fue otro año frío, pero no tanto, y logramos una mejor armonía entre la madera y la madurez. En 2018 logramos el punto justo de fermentación en barrica nueva, solo el 15%. Fue una maduración limpia y sana, logamos cosecharlo antes de la ola de calor, y por eso salió algo tropical. La 2019 está muy buena, algo más neutra y más lineal por la curva de madurez, muy equilibrada por la madera. La 2020 no se embotelló y la 2021, que está en barricas, me gusta mucho por el trabajo más intenso en el viñedo, con más manejo sobre las 4,5 hectáreas de Chardonnay de Viña Vida en Los Chacayes, eligiendo las puntas que están más lindas y sin tanto vigor. Elaborado algo reductivo y oxidativo para tener más componentes y poder jugar”, resume Santiago.

Y si bien es una cepa que lo desafía, la más difícil de elaborar es la Pinot Noir y luego la Cabernet Sauvignon, según el winemaker. El Pinot Noir viene de Los Arboles, a 1400m, una zona mucho más húmeda con clima más fríos, lugar ideal para esta variedad. En bodega no se hace mucho, fermenta en tanque con racimo entero una parte, tipo sándwich (sólido, líquido, sólido) se mueve al principio y luego se lo deja quieto.

El Cabernet Sauvignon era de Agrelo, pero desde 2015 lo hace con uvas de Tupungato (Gualtallary), de un viñedo en la zona baja, a 1100/1150 msnm, con suelos de pura arena, muy cálidos, “y es una bomba de maduración y de frutas, lo mismo que el Malbec.  La 2019 fue una cosecha más fresca que la 2018 y me gusta mucho cosecha porque pudimos cosechar temprano, como el 10 de marzo. Es una cepa muy demandante de agua, le falta y se clava, no sigue madurando, y la ventana de cosecha es mucho más chica que la del Malbec, pasa de verde a sobre maduro muy rápido, o se vuelve muy piracínico. Tratamos de ir al punto medio, ya que es una zona alta pero cálida. Y eso maduro da notas a pimentón, paprika y especias dulces como salvia y estragón. Es un vino que el consumidor lo ama, aunque para mi hay tantos que es difícil de encasillar. Y seguro que este vino necesita un año en botella para acomodarse”, explica detalladamente Santiago.

Por su parte, el Cadus Blend of Vineyards Malbec nació en 2009, y originalmente combinaba uvas de los viñedos más tradicionales. Pero Santiago se propuso lograr un vino que refleje el carácter actual de una gran región. Hoy combina Malbec de Agrelo, con otros de Los Chacayes (Viña Vida) y de Los Árboles. Agrelo aporta ciruela, pasas y te negro, además de volumen en boca. Mientras que las uvas del Valle de Uco suman mucha acidez, fruta fresca y especias. Todos fermentan y se guardan por separado, pero ya no 100 % en barricas nuevas.

Para el final quedan los dos Single Vineyard de la casa, Viña Vida y Las Torcazas.

Del primero se hicieron 2013, 2014 y 2015, aunque salió tarde al mercado. Hoy el segundo va por la 2018 mientras que el otro recién por la 2016, y falta para que se haga conocido. Según el enólogo el Viña Vida es para entender si un vino de guarda, es realmente de guarda. Elaborado a partir de Malbec de un cuartel central, el 8 Centro y el 2 Oeste.  Luego, pasa 24 meses de guarda en barricas, 40% nuevas, “apenas abierto está cerrado, pero luego despliega lo que es el Malbec de Los Chacayes, hay notas de lavanda, poleo, menta y eucaliptus, también fruta roja, no tanto negra ni confitura. Es más salvaje, respeta el terroir”, cierra Santiago.

De Agrelo llega Las Torcazas, no tan maduro, pero con notas ciruela y pasas de uvas, algo de te negro, según su creador. “Sigue siendo el más clásico de los Cadus, pero con mas equilibrio y elegancia”, asegura.

Hoy, si bien Santiago sigue contando con el valioso asesoramiento del afamado flying winemaker Paul Hobbs, con cada cosecha que pasa su sello se hace más evidente en las copas, marcando un nuevo inicio en la historia de Cadus.

Degustación vinos de Cadus

Cadus Appellation Vista Flores Chardonnay 2019

Cadus Wines, Vista Flores, Valle de Uco

$$$$ (Feb2022 $1800)

Blanco con tensión y frescura que hablan de un lugar, pero también de una intención. Con carácter de frutas blancas y paladar ágil gracias a sus texturas vibrantes. No es muy profundo, pero sí definido su estilo, con un toque oxidativo al final que aporta personalidad. Tiene más vida por delante. beber entre 2022 y 2024. Puntos: 90

Cadus Appellation Los Chacayes Malbec 2019

Cadus Wines, Los Chacayes, Valle de Uco

$$$$ (Feb2022 $2150)

Los aromas integrados anticipan su paladar franco. Con buen agarre e intensidad, más concentrado que su par de Tupungato. Acá se nota bien el carácter frutado del lugar, con fuerza y hasta con potencia, y esto le servirá de sostén para la guarda. Beber entre 2022 y 2025. Puntos: 91

Cadus Appellation Tupungato Malbec 2019

Cadus Wines, Tupungato, Valle de Uco

$$$$ (Feb2022 $2150)

Con uvas provenientes de un viñedo de suelo arenoso con calcáreo, ubicado en Gualtallary, Santiago Mayorga logra este Malbec de aromas suaves y frutados, con algo de fruta negra y especias frescas. En boca se siente su buen agarre con leves dejos de crianza que le suman estructura a su final de boca. Se mantiene joven y puede ganar más armonía con la estiba. Beber entre 2022 y 2024. Puntos: 90

Cadus Appellation Tupungato Cabernet Sauvignon 2019

Cadus Wines, Tupungato, Valle de Uco

$$$$ (Feb2022 $2130)

De aromas compactos e intensos, pero también equilibrados, con leves dejos de confituras. Paladar fresco, con fuerza y cierta potencia, con agradables notas de crianza y buen agarre. Es cálido en su mensaje más allá de su frescura, y la madera es protagonista. Beber entre 2022 y 2025. Puntos: 90

Cadus Signature Series Pinot Noir 2020

Cadus Wines, Tunuyán, Valle de Uco

$$$$ (Feb2022 $2350)

Con aromas frutales nítidos, a cerezas (rojas) y guindas. Paladar limpio y directo, pero con la intensidad del Pinot Noir. Franco y de buena frescura, no tan mordiente, propio de una cosecha más cálida. En su final hay algo de especias secas que persiste y dejos de crianza (en barricas de roble francés durante 11 meses para el 50% del vino). Beber entre 2022 y 2023. Puntos: 90

Cadus Signature Series Criolla Chica 2020

Cadus Wines, Vista Flores, Valle de Uco

$$$$ (Fabe2022 $2350)

Sus aromas a frutas rojas maduras son muy particulares, intensos y hasta levemente punzantes. De paladar franco, con cierto graso y buen volumen, generoso en su carácter frutado y más voluptuoso que en sus versiones anteriores. Mejoró, es más vino, criado en huevos de concreto con borras finas durante 11 meses. Puntos: 90

Cadus Blend of Vineyards Malbec 2018

Cadus Wines, Mendoza

$$$$ (Feb2022 $3270)

Para hacer este blend de Malbec se combinan uvas de tres viñedos (Alto Agrelo, Los Chacayes y Los Árboles) que Santiago Mayorga conoce muy bien y sabe qué aporta cada uno al vino. De aromas compactos y buen cuerpo, paladar franco, con fuerza, algo negro y cargado. La concentración buscada tiene que ver con mantener un estilo y con su potencial. Beber entre 2022 y 2025. Puntos: 90,5

Cadus Single Vineyard Las Torcazas Malbec 2018

Cadus Wines, Alto Agrelo, Luján de Cuyo

$$$$$ (Feb2022 $5450)

De un viñedo relativamente nuevo (15 años) y con alta densidad de plantación (5000 plantas/hectárea) nace este Malbec con fuerza y personalidad. De aromas cargados y paladar concentrado, con taninos firmes y trago profundo. Potente y classy, se nota el carácter de la primera zona (Alto Agrelo), pero necesita botella. Beber entre 2023 y 2028. Puntos: 91

Cadus Single Vineyard Viña Vida Malbec 2016

Cadus Wines, Los Chacayes, Valle de Uco

$$$$$ (Ene2022 $5100)

Santiago Mayorga vinifica las uvas de esta viña modelo al pie de Los Andes, desde que llegó a la bodega. Hoy, con esta flamante cosecha el winemaker consolida la etiqueta y la coloca entre las más destacadas. De aromas definidos, con carácter y elegancia. Algo concentrado, pero con la frescura del año resaltada por sus taninos incipientes, y con la madera que empieza a integrarse. De final largo, con potencial. Beber entre 2022 y 2026. Puntos: 93