Cada vez son más las bodegas que tienen su propia tienda de vinos on line, en sintonía con la evolución de las tendencias de consumo, porque cada vez son más las personas que hacen sus compras sin moverse de casa.

En el caso de los vinos, el público en general sigue siendo más tradicional, y prefiere vivir la experiencia de compra en persona. Pero cada vez hay más “nuevos compradores” que no precisan de la recomendación personal, porque se valen de otros medios. Como por ejemplo Portelli App, la video guía de vinos argentinos lanzada hace un par de años, con más de 1000 vinos para elegir. Cada etiqueta viene acompañada de su ficha técnica, notas de cata y calificación, un video, y una derivación a las principales tiendas online.

¿Cuál es la diferencia entre la tienda de una bodega y la de una vinoteca? Claramente, la diversidad de vinos que ofrecen unas y otras. Por un lado, las bodegas solo venden marcas propias, pero en muchos casos en presentaciones exclusivas, que al no estar a la venta en otras vinotecas (o sitios web), no genera competencia con sus clientes (hablando de la cadena comercial). También, suelen ofrecer packs con copas y accesorios. Sin dudas, es ideal para aquellos que se fanatizan con una bodega, porque es una manera de relacionarse directamente. Y otra de las ventajas de estar “enganchado” es poder acceder a distintas promociones especiales todo el tiempo.

Susana Balbo Wines, Chakana, Lagarde, Don Cristóbal, La Mascota Vineyards, Humberto Canale, y Bodegas Bianchi, han tomado la delantera en esta temática.

“Hoy, quedarse en casa es una medida de cuidado fundamental. Esta nueva dinámica de prevención social alienta otros comportamientos de consumo. Por eso, desde Bodegas Bianchi impulsamos el comercio online de vinos, lo cual resulta de vital importancia en un momento como este. A través de distintas promociones, nuestra página web tiene disponible todo su portfolio, desde New Age hasta las partidas limitadas de vinos premium”, cuenta Adrián Cura, Director de Marketing.  

Desde su lanzamiento, el e-commerce de Bodegas Bianchi fue un éxito. La bodega ha tenido un crecimiento sostenido en su canal de venta directa online ofreciendo una experiencia de compra muy valorada por los consumidores.

“En julio de 2017 redefinimos la propuesta de valor de Bodegas Bianchi. En ella acordamos que no íbamos a decidir más por nuestros consumidores. Nos propusimos acercarnos lo más posible para identificar cuáles eran sus necesidades y satisfacerlas. Vimos que muchos consumidores sentían que el vino era sólo para conocedores, entonces nos pusimos el objetivo de “democratizar el vino”-analiza Josefina Artemisi, Digital Manager de Bodegas Bianchi y agrega: “Por eso, un año después definimos que internet era la herramienta más democrática para acercarnos a ellos y así se inició el proyecto. Hoy la tienda está abierta los 365 días del año y cada uno puede comprar desde donde quiera y cuando quiera. Allí se encuentra toda la información que un consumidor puede necesitar de nuestros productos, se pueden dejar comentarios y le permite al usuario comparar precios con cualquier otra plataforma. Atendemos las dudas y consultas de nuestros consumidores, por teléfono, chat y Whats app de 9hs a 18hs todos los días hábiles”.

Las ventajas de comprar on line ya están fuera de discusión, solo hace falta más tiempo para que el consumidor gane en confianza con las plataformas de pago, y se acostumbre a vivir la comodidad de recibir en su casa lo que le llevó unos minutos de su tiempo, y algunos clics.

Ante los cambios “obligados” en los hábitos de consumo que propone la pandemia del coronavirus, este tipo de iniciativas toma fuerza. Porque sin dudas es la solución para seguir disfrutando vinos en casa o regalarlos, cuando no se puede salir.

Esta “nueva experiencia” de compra permite recibir pedidos desde todo el país, y conocer más al consumidor, como una manera de estar cerca de sus clientes actuales, y a la vez poder generar nuevos. Por otro lado, el “trakeo” de la información que proponen los sistemas se convierte en información muy valiosa, porque describe muy bien las preferencias de los consumidores, ya sea por las compras realizadas o también las consultas.

Tarde o temprano todas las bodegas deberán adaptarse a las nuevas tecnologías, pero sin perder su identidad. Mientras tanto, las vinotecas y supermercados van a tener que esforzarse cada vez más en el servicio y en el trato personal que ofrecen, porque solo así podrán marcar la diferencia. Tal es el caso de Fernando Musumeci (Musu), quién desde su vinoteca Mr Wines en Caballito, sigue generando fieles. Algunas de sus claves son; selección de pequeños productores y grandes vinos argentinos, atención personalizada, acciones en su vinoteca tanto presenciales (degustaciones y presentaciones de vino) como virtuales (videos en vivo @mr.wines). Además, realiza viajes temáticos a las principales zonas vitivinícolas para promover a los pequeños productores, y ha creado un evento anual dedicado a los vinos de la cosecha, además de haber lanzado un vino propio, exclusivo para los “cueveros”.

Por su parte, las grandes tiendas y los chinos solo ven en la política de precios, la única estrategia para diferenciarse. Y si bien es cierto que hoy el precio de un vino es una de las variables fundamentales a la hora de elegir una botella, la realidad es otra. Porque más allá de las posibilidades de cada consumidor y de la situación económica reinante en la Argentina hace décadas, hay aspectos mucho más relevantes en un vino: el origen, el hacedor, el estilo, la cosecha, etc. Claro que la relación calidad-precio influye, pero no debe ser el atributo principal de la decisión, si se quiere tener éxito al descorchar.

El comercio de vinos online propone un nuevo escenario de intercambio directo entre bodegas y consumidores. Al ser algo nuevo el crecimiento es exponencial. Pero eso también habla de la satisfacción de los usuarios, que cada vez son más.

Sobre El Autor

Hace 22 años degusté un vino por primera vez y supe que querría hacer de mi vida profesional. Compartir mi pasión; por eso me dediqué a comunicar el vino. Más de 30.000 vinos degustados y 20.000 publicados, más de 100 revistas editadas y miles de notas. Siete años en TV, cuatro en radio y seis en la web. Más de 20 exposiciones de vino organizadas y más de 30 concursos internacionales como jurado, además de muchos viajes a zonas vitivinícolas del mundo. Todo esto, simplemente me ayuda a conocer más, para poder compartirlo mejor.