Vinos de primeras viñas

El enólogo Juan Roby cumplió más de 20 años en Lagarde. Y es, sin dudas, quién más y mejor sabe interpretar a la familia Pescarmona (Enrique, Sofía y Lucila). Pero hace algunos años, y a tono con la evolución de la vitivinicultura nacional, quiso aprender mucho más de los viñedos, para poder interpretar también los diversos terruños de donde provenían las uvas. Durante un par de años trabajó codo a codo con el consultor Pedro Parra (el prestigioso terroirista chileno), realizando diversas calicatas, como así también viajes instructivos a otras regiones del mundo.

Y con ese aprendizaje se animó a incluir en toda la tradicional línea Guarda, la leyenda “selección de viñedos” cuando son blends de diferentes fincas, o Single Vineyard.

Así nacieron también los Primeras Viñas, con la intención de mostrar el carácter de diferentes terruños a través de las primeras vides plantadas de la bodega, ya sean viejos o nuevos viñedos.

La diferencia con los vinos de Proyecto Hermanas, está en la crianza en madera y en el punto de cosecha de las uvas. 
El primero de los Primeras Viñas en salir al ruedo fue el Malbec de Luján de Cuyo (Drummond y Perdriel). Luego el Cabernet Sauvignon de Perdriel, también desde la cosecha 2012, y por último el Malbec de Gualtallary desde 2015, hace un par de años.

Este proviene de un viñedo nuevo para la familia, que tenía plantadas (por su dueña original) 7ha de Malbec en pie franco. Y en estos últimos años Juan Roby plantó algunas más de Cabernet Sauvignon, Malbec, Cabernet Franc y Riesling, a partir de un estudio de polígonos y de las partes de suelo más pedregosas. 
Dice Juan que “Sofía se enamoró del pedemonte, porque la conecta; la montaña, trekking, etc.; y por eso dejó sin plantar un gran sector para mantenerlo como paisaje salvaje”. La idea allí es plantar 25 de las 70ha disponibles, y el resto conservarlo como pedemonte, y trabajar con la Universidad y el Conicet para entender que hay allí y así poder dejar un inventario de flora y fauna silvestres. Además, fueron replantando entre las parcelas un jardín autóctono, por estética, ya que a Sofía le gustan los jardines como a los ingleses. Además, han encarado un ensayo de parcelas en medio del pedemonte a la vez que en la zona desmontada; junto al Inta, al Conicet y a la Universidad de Mendoza; que pronto saldrá a la luz. 
Juan era consciente que la 2015 no era la gran cosecha de tintos para salir al ruedo con el flamante Primeras Viñas Gualtallary, pero el vino es interesante y típico del lugar. Austero, y con buen agarre, bien Diferente a los demás Primeras Viñas.