Los 50 vinos más destacados del 2019 para despedir el año

Este año la industria tuvo que hacer frente a la crisis económica, pero la calidad se incrementó. Las bodegas lanzaron muchos vinos, incluso algunos muy innovadores. Infobae realizó una selección de los más representativos:

https://www.infobae.com/tendencias/2019/12/31/los-50-vinos-mas-destacados-del-2019-para-despedir-el-ano/

por Fabricio Portelli

para Infobae

foto Shutterstock

(versión extendida)

Los 50 vinos destacados del año

El 2019 será recordado por muchas cosas en el ámbito del vino argentino, porque más allá que fue una cosecha extraordinaria, la industria tuvo que hacer frente a la crisis económica. Las elecciones plancharon las ventas, y el consumo per cápita siguió en baja, pero la calidad se incrementó. Las bodegas no se quedaron, lanzaron muchos vinos, incluso algunos muy innovadores. Y como todos los años, Infobae realizó una selección de los vinos más representativos de la actualidad.

El vino argentino sigue avanzando a pesar de todo. Apoyado en una evolución cualitativa que no detiene su marcha, y que permite estar disfrutando los mejores vinos de nuestra historia, mientras la industria enfrenta las adversidades que presenta la coyuntura nacional.

Una vez más, antes del cerrar el año, Infobae elaboró una selección de 50 etiquetas muy representativas de la actualidad del vino argentino, pero también que muestran un camino, lo que viene. Y si bien se trata de vinos de gran calidad, no son los mejores, ya que ese sería un listado de vinos ordenados por puntaje; el cuál solo refiere al aspecto cualitativo; el que seguramente repetiría muchas bodegas. Además, en su mayoría sería vinos partidas muy limitadas y de pocas bodegas, porque la calidad en el vino también implica inversión y foco, derivando en pequeñas producciones pensadas más para poder desafiar los límites que para satisfacer al mercado.

Pero sucedieron tantas cosas a lo largo del año en el ámbito local del vino, que hay mucho para destacar. Es por ello que esta lista es más representativa, destacando más la diversidad que propone la industria, e incluyendo una mayor cantidad de opciones para los consumidores. No se repiten bodegas o vinos del mismo productor elaborados con criterios similares. Tampoco se incluyen vinos de partidas muy limitadas y que no se consiguen en el mercado local, más allá que se trate de algunas de las etiquetas que mejor nos representan en el mundo, no porque lleguen a muchos consumidores globales sino porque son las que deslumbran a la prensa internacional.

El objetivo de esta selección es describir lo que fue el 2019 a través de las novedades más destacadas que se presentaron a lo largo del año, abarcando a todas las categorías de vino y segmentos de precio. Así, el listado puede reflejar lo que pasó y, sobre todo, lo que vendrá.

Todo lo qué dejó el 2019

Un vino es el resultado de muchas cosas; la uva, el viñedo, el clima, el hombre, el método de elaboración, la crianza, etc. Y luego todo ello se somete al consumidor que, en cada caso, opinará y elegirá. Es decir que hay una calidad que marca un camino, pero que ya no es un valor agregado, sino una condición ineludible.

Y si en un vino intervienen tantas variables, en un gran vino es lo mismo, pero se le suman infinitos detalles, desde los cuidados de la viña hasta la estiba en botella. Por ejemplo, para lograr una expresión de lugar más natural muchos hacedores eligen intervenir o menos posible. Pero para ello deben estudiar mucho. Da Vinci dijo “la simpleza es la máxima sofisticación”, y se refería a eso. Para lograr vinos más auténticos hay que desarrollar una vitivinicultura más sencilla, pero a su vez eso requiere de mucho estudio, preparación e inversión.

Antes de entrar en los highlights del año hay que comprender que, además, los vinos son una sumatoria de experiencia. Luego de una trilogía de añadas complicadas, como fue 2014, 2015 y 2016, llegó una excepcional; 2017, 2018 y 2019. Esto significa que se pueden encontrar grandes vinos en cualquiera de estos años; porque no todo es “culpa” del clima; pero sobre todo que hubo un gran aprendizaje. El 2016, a causa de El Niño, fue una año lluvioso y frío, y marcó un punto de inflexión que obligó a una nueva viticultura. Eso permitió lograr algunos vinos sobresalientes, pero fueron la excepción. Por eso, con la 2017; que fue más tradicional; se volvió al camino más conocido, a la zona de confort. Al llegar la vendimia 2018 con un clima casi perfecto, los vinos 2016 ya estaban dando que hablar, y sorprendiendo a todos. Sí, de una de las cosechas más complicadas de la historia habían surgido grandes vinos. Pero los 2017 ya estaban en bodega y la cosecha 2018 empezada. Sin embargo, la 2019 comenzó con todo ese aprendizaje desde la poda, que es cuando se define la calidad del vino a elaborar. Y eso, coronado con un clima muy favorable, derivó en (quizás) la mejor cosecha de los últimos años.

Y si bien hay algunos 2019 en esta selección, habrá que esperar uno o dos años más para que lleguen a las góndolas los peso pesados. Algo que sí está pasando con los 2016, y que son la prueba que trabajando en el viñedo con precisión se pueden lograr mejores vinos. No por casualidad la prensa internacional calificó algunos de ellos con 100 puntos. Al tiempo que algunos vinos (Malbec o Blends) con varias cosechas a cuestas tuvieron en la 2016 su añada más destacada, por ahora.

El Malbec es otra gran noticia (por suerte) como siempre. Porque es invalorable tener una variedad emblema que ofrezca tanta diversidad y que se asocie con nuestro país en todo el mundo. Una vez más la Argentina demuestra que se puede seguir avanzando en la diversidad de estilos y de expresiones con el Malbec, más allá de los terruños. Con vinos de parcelas o lunares con un tratamiento específico de acuerdo a la composición del suelo y la retención de agua, para luego fermentarlos y criarlos con la menor intervención posible, pero con los máximos cuidados. La evolución del Malbec pone en jaque a las demás variedades, aunque por suerte los hacedores ya no piensan en buscarle un sucesor, sino distintos compañeros (Bonarda, Cabernet Franc, Pinot Noir, etc.). No obstante, una de las mejores opciones para ampliar la oferta de Malbec es con blends que lo tengan como protagonista. Y sin dudas, el partenaire más elegido es el Cabernet Sauvignon; otro de los candidatos a consagrarse como varietal.

A pesar que Mendoza acapara la mayoría de los viñedos (más del 80%) y bodegas del país, hay novedades en cuanto a regiones. Porque más allá de la consolidación de los Altos Valles Calchaquíes (incluyendo La Quebrada de Humahuaca), ha sido el año de Patagonia, incorporando un nuevo jugador; Chubut. Ni más ni menos con los vinos más australes del mundo, y con gran potencial, demostrando que se puede seguir desafiando los climas y lugares más extremos.

Por su parte, entre las zonas más destacadas de Mendoza ya no solo hay terruños del Valle de Uco (como Gualtallary o Paraje Altamira), sino de Luján de Cuyo y Maipú, revalorizando la “primera zona”.

Y si bien hay varios vinos elaborados por nombres propios y ya consagrados de la enología nacional, muchos fueron elaborados por la “New Power Wine Generation”; jóvenes que se han ganado el respeto de sus maestros hacedores en base al trabajo y al profesionalismo con el que llevan a cabo su curiosidad en pos de lograr cada vez más y mejores vinos.

Pero sin dudas la categoría que más llamó la atención, gracias a las novedades presentadas a lo largo del año, fue la de los vinos blancos. Con distintos conceptos de elaboración (vinos de quietud, vinos naranjos, blend blancos, etc.), con variedades originales (como Grüner Veltliner), y con una calidad sostenida que permite tener cada vez más vinos blancos que están a la altura de los mejores tintos argentinos. Esto demuestra que, si una variedad tiene atributos diferenciales; como la Chardonnay o la Torrontés; se pueden lograr grandes vinos, incluso con capacidad de guarda.

Los espumosos, más allá de la época del año, también han dado que hablar gracias a su evolución. Curiosamente el gran cambio no se produjo en la bodega, ya que los métodos siguen siendo los de siempre, sino en el viñedo. Con uvas cosechadas a mayor altura se lograron vinos base más tensos, y eso derivó en vinos espumantes con más fineza y carácter. Por eso, hoy ya no hay nada que envidiarle a los Champagne y a los Cava.

Lo orgánico cada vez toma más fuerza, quizás no tanto a nivel certificación. Pero cada vez son más los viñedos que se tratan, por filosofía y condiciones naturales, sin uso de agroquímicos, pensando en una viticultura más sustentable.

Por último, el segmento de mayor innovación no fue la alta gama sino se dio en los rangos de precios más accesibles, a tono con las necesidades del mercado. Algunos buscando consolidar su prestigio e intentando devolverle al vino su placer cotidiano. Otros, promoviendo un consumo alternativo y más descontracturado en busca de nuevos consumidores. Y sin dudas, el desembarco del vino en lata antes que termine el 2019 fue lo más impactante. Por ahora solo con vinos dulces naturales o espumosos dulces de baja graduación, porque la lata obliga a un consumo en frío, y se necesitan vinos que no pierdan su atractivo con la baja temperatura de servicio. Y seguramente, en esas reuniones multitudinarias donde hay un tacho con hielo y cientos de latas de cervezas, gaseosas, y energizantes, la llegada del vino en lata será muy bien recibida. Esto permitirá multiplicar la oferta y, sobre todo, ampliar las ocasiones de consumo de vino llegando a lugares imposibles para la botella de vidrio (fiestas, playa, pic nic, etc.).

Una vez más la diversidad que ofrece el vino argentino es destacable, permitiendo a los consumidores tener a disposición más y mejores vinos para elegir.

Los vinos más destacados de 2019

Don Valentín Lacrado Tinto 2019

Bodegas Bianchi, Mendoza ($165)

Los buenos vinos trascienden los años y atraviesan generaciones. Desde 1965 el Don Valentín es un blend original en su concepción, y está muy presente en la mesa de los argentinos. Su calidad demuestra que no solo hace falta precisión para los vinos de alta gama, ya que las decisiones de uno masivo también requieren de mucho trabajo en equipo. Actualmente elaborado a base de Tempranillo, Bonarda y Syrah, de aromas agradables a frutas rojas y especias. Buena fluidez y cierta intensidad en sus sabores francos, con taninos amables y un final directo y envolvente. Muy bien logrado y bastante equilibrado en sus expresiones. Beber entre 2019 y 2020.

Puntos: 87

Santa Julia Chenin Dulce Natural 2019 (en Lata)

Santa Julia, Maipú, Mendoza ($150)

Fue un gran año para la bodega y con muchas novedades, pero sin dudas esta es la más innovadora. No tanto por su contenido sino por su contenedor, y por todo lo que puede llegar a aportar. Apostando al líder de la categoría, Santa Julia lanzó en noviembre la versión en lata de su Chenin Dulce Natural. Un vino que de por sí es agradable y fresco, con un dulzor equilibrado y finas burbujas que resaltan su carácter frutal. Y en este flamante envase para vinos sin dudas se va a lucir, porque la lata se debe abrir cuando está bien fría, y este vino logra mantener sus atributos. Una gran apuesta para llegar con el vino a nuevas situaciones de consumo.

Puntos: 87

Mandala Rosé 2019

Mandala Wines, Agrelo, Mendoza ($270)

Cada vez son más los vinos que quieren ser menos vinos para captar más consumidores nuevos. Y si bien todos aportan a la causa, algunos logran ser innovadores sin perder atributos vínicos en el camino. Mandala “State of Wine, Mind”, propone un estado de ánimo a partir de vinos fáciles, bajos en alcohol y con práctica tapa a rosca, sacando el foco del vino y pensando más en la ocasión. Es el objetivo de este rosado a base de Syrah y Pinot Grigio, de aspecto brillante y aromas florales. Paladar refrescante, con buen volumen y leve aguja que resalta su carácter frutal. Directo y bien logrado, es ideal para disfrutar en cualquier situación.

Puntos: 88

Chandon Extra Brut

Bodegas Chandon, Valle de Uco, Mendoza ($410)

Fue un año muy especial para Chandon, que en 2020 cumple 60 años en la Argentina, porque se retiró el gran Onofre Arcos como Chef du Cave, y dejó a Diego Ribbert en su lugar, quien regresó a la bodega. Todos están muy orgullosos de los cambios con la materia prima a partir del 2016, y los mueve la pasión por seguir perfeccionando los procesos para lograr las mejores uvas de Pinot Noir y Chardonnay. Cada vez cosechadas a mayor altura y más temprano (los vinos de hoy poseen 12,5 grados aproximadamente). Con sus típicos aromas a frutas blancas y burbujas persistentes. De buen volumen y más vertical, trago profundo con agarre, frescura y vivacidad.

Puntos: 90

Norton Special Edition Grüner Veltliner 2018

Bodega Norton, Agrelo, Luján de Cuyo ($575)

Primer exponente nacional del cepaje más importante de Austria, que llega de la mano de Norton por el origen de la familia Swarovski; propietaria de la bodega. Y si bien lo original no es sinónimo de calidad, acá se dan ambas. Grüner Veltliner es una de las nuevas apuestas para innovar en varietales únicos y exclusivos, de David Bonomi. De aromas intensos y florales, bien tenso en boca y con buen cuerpo. Es refrescante y con agarre, algo directo en su carácter, con cierta untuosidad y dejos que hablan de madurez. De trago profundo, llena la boca con fuerza y personalidad propia, y sobre el final asoman las notas de levaduras. Beber entre 2019 y 2021.

Puntos: 90

Cadus Signature Series Pinot Noir 2018

Cadus Wines, Los Árboles, Valle de Uco ($890)

“The Future 50” creada por International Wine & Spirit Competition (IWSC) premió a las 50 personalidades más influyentes del mundo del vino, y Santiago Mayorga; enólogo de Nieto Senetiner y Cadus Wines; fue el único argentino en obtener esta distinción. Este Pinot Noir es una novedad en esta línea, en la cual Santiago explora nuevos terruños y técnicas a partir de variedades especiales. Es un tinto bien apoyado en la fruta, roja y vivaz, con algo de texturas de escobajo (10%), y un buen carácter. De paso mordiente y trago agradable, más en un estilo Borgoña joven. Una nueva alternativa que demuestra lo que puede dar este cepaje. Beber entre 2019 y 2020.

Puntos: 90

Lagarde Proyecto Hermanas White Blend 2018     

Pescarmona Wines, Gualtallary ($1250)

La evolución de los vinos argentinos permitió el auge de los blancos, y entre ellos el de los blends. Las hermanas Sofía y Lucila Pescarmona, se unieron enológicamente para crear un nuevo proyecto familiar. Blend de Chardonnay (50%), Sauvignon Blanc (37%) y Semillón (13%) de distintos viñedos. Sus aromas son elocuentes más allá que la etiqueta no revele sus componentes, porque son frescos y con predominio de las notas herbales típicas del Sauvignon Blanc. De paladar franco, fresco y tenso, con un carácter sutil y dejos maduros bien equilibrados. De buen volumen y paso vivaz, con un final que empieza a ser complejo por un buen manejo de las lías. Beber entre 2019 y 2021.

Puntos: 90

Artesanos Organic Malbec 2018

Bodega Argento, Agrelo, Mendoza ($450)

Sin dudas, una de las novedades del año que poco a poco va llegando a las góndolas antes del cierre del año. Acá hay mucha fuerza en la claridad de la marca y del concepto, no hace falta explicar nada. Artesano + Organic lo dice todo, y el estilo de los vinos son fieles a ese mensaje. Una apuesta muy fuerte de la casa por los vinos orgánicos, más por filosofía de producción que por moda. Es un Malbec moderno y con una frescura que realza la pureza de la fruta. Expresivo y más apoyado en sus texturas, de buen agarre y fluidez, paso consistente, con especias y leves dejos herbales. Paladar franco y persistente sin contacto con madera. Beber entre 2019 y 2021.

Puntos: 90

Gran Lurton Corte Friulano 2018

Piedra Negra, IG Los Chacayes, Valle de Uco ($1000)

Este blend blanco fue uno de los pioneros en la categoría, así como los hermanos Lurton lo fueron en el Valle de Uco. Ellos siempre creyeron en el Tocai Friulano como base de este blend que se mantiene vigente. Hoy, el auge de la moda de los assemblages blancos lo ha convertido en una de las referencias. De aromas delicados, y con las notas de crianza que todavía se hacen sentir, también en boca, más allá de su carácter propio y agradable frescura. Con buen volumen y paso firme, hay tensión con algo floral en su profundidad que lo hace muy original. Además, tiene todo para ganar equilibrio y complejidad con la guarda. Beber entre 2019 y 2022.

Puntos: 90,5

Trapiche Perfiles Calcáreo Malbec 2017

Bodega Trapiche, Gualtallary, Valle de Uco ($650)

El trabajo que vienen haciendo en los últimos años Marcelo Belmonte y Sergio Case, junto a Daniel Pi es evidente e impactante. Porque más allá del aporte a los vinos top de la casa, los resultados empiezan a formar parte de líneas más accesibles, que llegan al consumidor con mucho valor agregado dentro de la botella. Acá se nota la mano y el estilo de una línea, con aromas austeros a frutas rojas y suaves ahumados. De paladar refrescante, con buena fluidez y un carácter compacto. Si bien habla la madera en el final, gana la fruta roja y fresca, y se aprecian muy bien sus texturas vibrantes y finas, que sugieren un buen potencial de guarda. Beber entre 2019 y 2023.

Puntos: 90,5

Nieto Senetiner Bonarda Trilogía Tupungato 2018

Bodega Nieto Senetiner, Tupungato, Valle de Uco ($700)

El enólogo Roberto González es, sin dudas, quién más conoce a esta variedad, y lo demuestra con esta flamante línea; tres Bonarda de zonas diferentes. Son vinos que nacen de la experiencia, ya que desde el 2000 que el enólogo lo elabora en la Alta Gama, aportando mucho al desarrollo y potencial de la uva. Este es fiel al Valle de Uco y al cepaje. De buen volumen, con músculo y carácter frutal, y la madera que se siente, pero bastante bien integrada. De trago fluido y mordiente, fresco y con algo de calidez en mensaje frutal, con el típico dejo vegetal. Es amable, y asoman confituras y ahumados sobre el final. Beber entre 2019 y 2021.

Puntos: 90,5

El Esteco Blend de Extremos Torrontés 2018

Bodega El Esteco, Altos Valles Calchaquíes ($550)

El concepto está muy bueno, pero no por su significado sino porque realmente los vinos muestran un carácter diferente que se asocia directamente a esa “vinculación” de los dos terruños extremos. Y esto es muy bueno para la línea y la bodega, porque no siempre los conceptos se sienten tan claros en las copas. Hace tiempo que Alejandro Pepa y Claudio Maza vienen trabajando en conjunto en dos de los Valles Calchaquíes con mejor presente y mayor potencial; Cafayate (1750m) y Chañar Punco (2000m). Así nace este Torrontés con sus típicas fragancias expresivas, paladar franco y fresco, voluptuoso y ágil. Con tensión, profundidad y nitidez. Beber entre 2019 y 2020.

Puntos: 91

Clos de los Siete 2016

Clos de los Siete, Vista Flores, Valle de Uco ($700)

En 2019 el Clos de los Siete cumplió 20 años, un hecho histórico del campo de viñas ideado por Michel Rolland. Hoy, con quince cosechas consecutivas en su haber desde 2002, el Clos de los Siete se ha recibido de gran vino. Porque encontró un equilibrio de estilo más allá de cada añada. En este 2016 se nota más el viñedo equilibrado que las complicaciones climáticas de El Niño. Manda el Malbec, con frescura y frutas de baya, y dejos herbales en el final de boca. Hay fluidez, pero con cierta consistencia, y también ganó en vivacidad. Un tinto completo y fiel de Uco, con taninos incipientes y la madera más integrada. Beber entre 2019 y 2021.

Puntos: 91

Ayni Torrontés 2019

Bodega Chakana, Valle de Uco ($650)

Con uvas orgánicas de Gualtallary y Los Chacayes se elabora este Torrontés tan original como natural. Porque tanto Gabriel Bloise (enólogo) como Juan Pellizatti (propietario) están muy convencidos que el futuro de la enología moderna está en la naturaleza, sin agregado de sulfitos a los vinos ni agroquímicos en los viñedos. Este es un blanco que bien puede ser un naranjo, porque fermenta con sus pieles. De aromas florales, algo de con cáscara de naranjas. Buen volumen, y un carácter propio que va más allá de la acidez sostenida. Porque su paso es graso y también mordiente, con un final persistente, y suaves dejos maduros. Beber entre 2019 y 2022.

Puntos: 91

Finca La Anita Gran Corte 2017

Finca La Anita, Agrelo, Mendoza ($925)

Blend muy pensado y acertado, apoyado en la variedad más emblemática de FLA (Syrah, 59%) con aportes de Malbec. Y si bien se lanzó en 2018, este año alcanzó su momento de esplendor, a tono con las novedades de la mano de su flamante enólogo-propietario, Richard Bonvin. De aromas intensos pero delicados y paladar fresco, con carácter de fruta y buen volumen. Hay fluidez y algo de frutas negras y especias, con agarre. En su final aparece la madera bien integrada. Un nuevo corte de Finca La Anita que nada tiene que ver, al menos en estilo, con el antiguo Finca, marcando una nueva era de esta pequeña pero icónica bodega argentina. Beber entre 2018 y 2022.

Puntos: 91

Colección 1310 Block C2 Chardonnay 2017

Finca Ferrer, Gualtallary, Valle de Uco ($1300)

Desde hace más de cinco años que Daniel Ekkert es el asesor enológico de esta bodega, que sabe mucho de vinos espumantes y sus variedades más aptas, porque cuenta con el respaldo de Freixenet; principal productor del mundo de espumosos método tradicional. Esa es la razón por la cual el Pinot Noir y el Chardonnay, de parcelas selectas y con las plantas más viejas, dieron vida a partidas muy limitadas. Este blanco, de buen ataque fresco, con volumen y carácter generoso habla de la altura y del lugar. De paladar franco y con cierta madurez, resulta impetuoso y profundo, con fuerza y buen potencial, para descorchar o guardar. Beber entre 2019 y 2022.

Puntos: 91

Pulenta Estate Gran Malbec 2016

Pulenta Estate, Valle de Uco ($2650)

Pulenta es uno de los nombres propios de la historia vínica nacional, y para mantenerlo vigente hacen falta vinos a la altura. Algo que los hermanos Hugo y Eduardo Pulenta vienen logrando hace casi dos décadas, en su pequeña bodega modelo de Alto Agrelo. Este gran Malbec se concibe a partir de una combinación de uvas provenientes del Valle de Uco. De aromas intensos, y se nota por la cosecha que la madera juega un papel fundamental. Porque hay fruta roja pero también tostados. De paladar franco y fluido, pero con cierta consistencia y paso expresivo. Y si bien está más para descorchar, en la estiba puede ganar más de equilibrio. Beber entre 2019 y 2023.

Puntos: 91

Magdalena Toso 2015

Pascual Toso, Barrancas, Mendoza ($3880)

El terruño Barrancas está captando cada vez más la atención de los consumidores gracias a vinos como este, concebido en homenaje a la madre del fundador de la bodega. Un blend a base de Malbec (73%) con Cabernet Sauvignon (27%), que puede variar sus proporciones de acuerdo a la cosecha. De aromas profundos y nítidos, con todo bien amalgamado. En boca es voluptuoso, con taninos finos que marcan su paso, y un carácter franco, con la madurez de la cosecha y la tipicidad del terruño. Elaborado por el enólogo Felipe Stahlschmidt, y con más vida por delante. Unos años más de botella le van a dar la complejidad que pretende y merece. Beber entre 2019 y 2023.

Puntos: 91

Trivento Gaudeo Tunuyán 2015

Bodega Trivento, San Pablo, Valle de Uco ($1700)

Sobre un suelo aluvial cerca del río Las Tunas, y con alta presencia de carbonatos, se encuentra el viñedo; plantado en 2011; de donde provienen las uvas para este flamante Malbec by Germán Di Cesare. Quién ha logrado desde enología imponer un concepto y convencer a marketing para crear una trilogía. Este Malbec es una pura expresión del cepaje y del lugar. Con buena fruta negra, tonos herbales, y la madera que se nota sutil. De aromas densos y frescos, con todo integrado. Trago fluido y texturas finas, refleja las intenciones del hacedor, y tiene para ganar más equilibrio y complejidad con la guarda. Beber entre 2019 y 2022.

Puntos: 91,5

Grey Moustache Malbec 2014

Entrevero Wines & Vineyards, Mendoza ($2350)

Matías Tomás Prieto es uno de los miembros más activos de la “New Power Wine Generation”, un grupo de jóvenes profesionales del vino que se propuso revolucionar la industria; y lo está logrando. Toda su independencia y libertad conceptual están en depositados en este proyecto propio. Este es un Malbec importante, compuesto por uvas de Las Compuertas (80%), Agrelo y Lunlunta. Sus aromas son intensos y elocuentes, con cierta densidad. De carácter fresco y de frutas rojas, con buen volumen, paladar franco, con leves dejos herbales, y texturas granulosas finas. Llena la boca, es jugoso y persistente, y tiene más vida por delante. Beber entre 2019 y 2024.

Puntos: 91,5

Colomé Altura Máxima Malbec 2016

Colomé, Salta ($6000 c/estuche)

Con poco dicen mucho, porque la proporción de viñedos plantados en el NOA es ínfima en relación a la región de Cuyo. Sin embargo, sus vinos hacen mucho ruido, y también muchas nueces. Para algunos críticos internacionales este fue el mejor vino argentino hace algunos años, gran premio a las dificultades que supone cosechar a más de 3000 metros, logrando cumplir uno de los sueños vínicos del dueño de casa, Donald Hess. De aromas expresivos, con leves notas a frutas rojas y especias. Buen volumen y frescura, con dejos herbales que hablan del lugar. Taninos firmes y maduros, y un final herbal refrescante que levanta y da profundidad. Beber entre 2019 y 2026.

Puntos: 91,5

Familia Schroeder Pinot, Malbec 2016

Familia Schroeder, San Patricio del Chañar, Neuquén ($1750)

La aventura ya lleva 20 años, y Neuquén ya es considerada una provincia vitivinícola respetada. Desde le primer día, la bodega apostó por el Malbec y el Pinot Noir. A priori dos obviedades, pero nada fáciles de lograr con serias pretensiones. Y luego de mucho trabajo, estudio y ensayo, el enólogo Leonardo Puppato les encontró la mano a ambos cepajes. Este original blend lleva varias cosechas en el mercado, y en esta 2016 ha ganado en delicadeza y expresión. De trago mordiente y buen carácter frutal, paladar fresco y franco, también equilibrado en su final, con suaves notas de crianza. Hay una intención y también un vino con potencial. Beber entre 2019 y 2022.

Puntos: 92

Otronia Bloque I Pinot Noir 2017

Otronia, Chubut, Patagonia ($4500)

Esta flamante bodega se sitúa en el centro sur de la Provincia de Chubut, casi al límite con Santa Cruz. Posee 50 hectáreas de viñedos orgánicos en la Latitud Paralelo 45, 33 LS; quizás los más australes del mundo. Este vino no solo resume el potencial de una nueva región, sino lo extremo que puede llegar a ser el hombre vínico si se lo propone. Y este Pinot Noir de Juan Pablo Murgia es cosa seria. Con buen volumen y agarre tenso, la madera se siente integrada, y acompaña el carácter y la complejidad, con austeridad, del vino. Sus capas delicadas de texturas y su tipicidad frutal invaden el final de boca, alargando el placer. Beber entre 2019 y 2022.

Puntos: 92

Fin Single Vineyard Syrah 2015

Bodega Del Fin del Mundo, San Patricio del Chañar ($1200)

Juliana Del Aguila tiene un gran desafío, unir el principio y el fin del mundo del vino; la historia y el potencial. Porque además de la bodega patagónica, su familia posee la bodega Karas en Armenia, donde se cultiva la vid desde hace más de 6000 años. Y la variedad elegida para ser insignia en ambos terruños es la Syrah. Esta fue la tercera cosecha de este vino que desvela al Sr. Eurnekian, y cuya variedad es oriunda de la antigua Persia. Sus aromas son intensos y equilibrados por el paso del tiempo, con notas de frutas negras maduras, especias y algo cárnico. De paladar franco, con buen cuerpo y taninos que se mantienen firmes. Beber entre 2019 y 2021.

Puntos: 92

Edad Media Blanco 2018

Altar Uco, Tupungato, Valle de Uco ($1600)

Juampi Michelini cree en que el paso del tiempo lo puede ayudar a crear vinos únicos, vinos de quietud, protegidos por el velo de flor. Así lo demuestra con este blend de Chardonnay, Semillón (20%) y Chenin (10%), de aromas maduros y complejos a frutos secos, con sutiles notas vegetales. Hay algo rústico de elaboración en su paso por boca, pero se nota que fue buscado. Paladar franco, con buen volumen y muy apoyado en su tensión. Es un vino bien de ataque y final no tan persistente, con el carácter que le da la crianza biológica, cierta austeridad frutal, y un final floral seco. Por su fuerza, hay vino para rato. Beber entre 2019 y 2023.

Puntos: 92

Riglos Gran Corte 2016

Bodega Riglos, Gualtallary, Valle de Uco ($1700)

Este blend (en esta cosecha de Malbec 34%, Cabernet Sauvignon 33%, y Cabernet Franc 37%), expresa el carácter del terruño desde su primera edición en el año 2005. Y si bien muchas cosas cambiaron desde su debut en el mercado, la esencia de Finca Las Divas se mantiene intacta. De aromas delicados, pero no muy expresivos. Buen volumen, con los típicos dejos herbales que le ganan al carácter frutal del Malbec. Taninos finos e incipientes, y una buena madera que aporta profundidad con tonos ahumados. Hay un equilibrio casi elegante, más allá de la fluidez y el agarre, típicos de un gran vino joven y reflejo de la añada. Beber entre 2019 y 2022.

Puntos: 92

Pasacana Vinificación Integral 2016

Fernando Dupont, IG Quebrada de Humahuaca, Jujuy ($2350)

A veces, en viñedos extremos nacen vinos raros, distintos y originales, pero con muchas aristas. Y otras veces nacen grandes vinos a pesar de las adversidades naturales. Eso ha logrado Fernando Dupont en sus viñedos de altura de Maimará (2500 msnm) con este blend de Malbec (70%), Syrah (15%) y Cabernet Sauvignon (15%), de partida limitada. Fermentado y criado barricas nuevas de roble francés durante 24 meses. De muy buen carácter, entre moderno y salvaje, con fuerza de fruta y buen agarre. Aromas frescos y expresivos y paladar franco, completo, con gracia y personalidad propia, y va a seguir creciendo en la estiba. Beber entre 2019 y 2026.

Puntos: 92

Antología XXXVIII (38) 2014

Rutini Wines, Valle de Uco, Mendoza ($1760)

Los clásicos blends de Mariano Di Paola trascienden el tiempo, eso está bien comprobado desde hace décadas. Sin embargo, desde su llegada al Valle de Uco, les agregó a sus vinos nuevas capas de expresión y modernidad. Aquí combina Malbec (35%) y Merlot (10%) de Altamira), con Malbec (35%), Petit Verdot (10%) y Cabernet Sauvignon (10%) de Tupungato, logrando un tinto de aromas austeros pero intensos, y muy apoyados en las frutas de baya. De paladar fresco y franco, casi vertical, con leves dejos ahumados y herbales. Trago mordiente y vibrante, con buen volumen y taninos incipientes. Se nota que hay buen potencial. Beber entre 2019 y 2024.

Puntos: 92

Lindaflor Malbec 2012

Monteviejo, Vista Flores, Valle de Uco ($1500)

El 2012 fue año particular, ya que, por culpa del granizo de fines de 2011, perdieron gran parte de la producción. Sin embargo, Marcelo Pelleriti aprendió mucho de las adversidades climáticas ya que en los últimos 20 años también cosechó y elaboró en Pomerol. Y esa experiencia la vuelca año tras año en sus vinos de Uco. Este es un Malbec de aromas intensos a frutas a negras, paladar compacto y con agarre tenso, paso denso pero armónico. Se percibe un ahumado integrado, con gran carácter de frutas negras. Hay frescura y su trago es consistente, con un estilo bien definido y un interesante potencial, para descorchar o guardar. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 92

Doña Paula Selección de Bodega Malbec 2017

Doña Paula, Gualtallary, Valle de Uco ($1550)

Desde 1999 es uno de los Malbec referentes, aunque nunca se codeó con la fashion, como diría Miguel Brascó. Y si bien cambió de manos a lo largo de su historia, siempre fue un Malbec de expresiones equilibradas. No obstante, la evolución general llevó a que hoy se elabore 100% con uvas de Gualtallary. De buen volumen y frescura integrada, paso consistente y texturas granulosas finas. Con los ahumados de la madera que aún se sienten, pero se nota tiene todo para ganar más equilibrio y elegancia en botella. Es profundo, de paladar franco y joven, con buen agarre. Un vino que habla muy bien de la variedad y de su terruño. Beber entre 2019 y 2026.

Puntos: 92

Brioso Susana Balbo Signature 2017

Susana Balbo Wines, Agrelo, Luján de Cuyo ($1650)

Desde siempre, este blend le hizo honor a su nombre y a su autora, y a su manera cuenta una historia cada añada. Un vino que muestra en cada cosecha la fuerza y personalidad de un terruño clásico. Combinación precisa de Cabernet Sauvignon con Malbec, Cabernet Franc y Petit Verdot, criado durante 15 meses en barricas roble francés, aunque en esta cosecha comenzaron a utilizar componentes que no eran los más expresivos en un solo aspecto. Sus aromas son intensos pero equilibrados, con buen cuerpo y agarre, y una concentración buscada de fruta madura, pero paso fresco. De trago profundo y final persistente, con la madera bien integrada. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 92,5

Rosell Boher Grande Cuvée Millésimée 2015

Rosell Boher, Valle de Uco ($1650)

Alejandro “Pepe” Martínez es uno de los grandes responsables de que los argentinos dejemos de extrañar al Champagne, porque sus vinos espumosos han alcanzado un nivel de delicadeza y sofisticación como nunca antes. Aquí combina Pinot Noir con un toque de Chardonnay, y reposa más de 40 meses sobre sus lías. Y cómo los grandes vinos de Champagne, este vino solo se hace en añadas especiales. De aromas equilibrados, con dejos de frutas rojas y especias. Burbujas finas y persistentes, que brindan una textura elegante. Paladar fresco y voluptuoso, amable y profundo, y tiene todo para ganar más complejidad. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 92,5

Kaiken Mai 2016

Bodega Kaiken, Vistalba, Luján de Cuyo ($2000)

Este vino nace en un viñedo de más de 70 años. Y fue justamente esa expresión compacta y contundente la que convenció a Aurelio Montes de cruzar la cordillera para elaborar Malbec. Y los resultados de aquella aventura están a la vista, no solo por él sino por muchos otros hacedores internacionales. En esta 2016, Rogelio Rabino (enólogo) ha logrado cierta consistencia, con buena frescura, y un carácter de frutas rojas típico del Malbec. Carnoso y más moderno en sus expresiones, es un vino de lugar que mira hacia el futuro, de manera actual, sin tanta concentración por efectos de la añada, pero también de una nueva búsqueda del enólogo. Beber entre 2019 y 2024.

Puntos: 92,5

Bramare Zingaretti Vineyard Chardonnay 2018

Viña Cobos, Villa Bastías, Valle de Uco ($3100)

Sin dudas esta bodega se hizo famosa por sus Malbec, pero Paul Hobbs llegó a la Argentina a fines de los 80´para elaborar un gran Chardonnay. Esta es la gran novedad de la bodega, justo en “el año del Chardonnay” según el enólogo Andrés Vignoni, su joven hacedor. De buena frescura y con volumen, hay algo de austeridad, pero se siente la fruta blanca y la levadura tiene fuerza. También hay profundidad con mucha frescura. Es muy expresivo, con intención de complejidad y gran potencial de guarda porque la acidez es sostenida pero integrada. De buen volumen, con las notas de crianza bien puestas que asoman tenues sobre su largo final. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 92,5

Enzo Bianchi Gran Malbec 2017

Bodegas Bianchi, Los Chacayes, Valle de Uco ($3900)

Este single vineyard & single parcel no solo es un nuevo homenaje a don Enzo Bianchi, sino que marca un hito en la historia de la bodega, porque es el primer “Enzo” del Valle de Uco. Un imponente Malbec de Los Chacayes, de aromas expresivos, con dejos de madurez en su nítido carácter varietal. Con frescura y de trago moderno, es mordiente de taninos finos, y en boca se abre. Voluptuoso y fresco, de paladar franco y algo especiado, con un final delicado y profundo en el que asoma la crianza. Recién está dando sus primeros pasos, pero ya demuestra que es uno de los grandes exponentes nacionales de Malbec. Beber entre 2019 y 2027.

Puntos: 92,5

Estela Perinetti Grand Vin 2016

Las Estelas, Mendoza ($2150)

Estela Perinetti tiene mucha experiencia haciendo grandes vinos, ya que estuvo haciendo vinos en el grupo Catena Zapata. Ella fue la elegida por el Baron Eric de Rothschild y Nicolás Catena para dar vida a Caro, y luego por Laura Catena para elaborar sus Luca. Hoy, se lanza al mercado con proyecto propio pero apoyado en las dos variedades que más conoce; Malbec y Cabernet Sauvignon. Este blend es fiel reflejo de ello, elaborado con uvas del viñedo familiar en Finca Mangato, ubicado en el distrito de El Peral, Tupungato. Se lo nota joven pero equilibrado, fresco y con buen carácter frutal y especiado, y un final ahumado delicado. Beber entre 2019 y 2026.

Puntos: 93

Familia Mastrantonio 2017

Bodega Familia Mastrantonio, Gualtallary, Valle de Uco ($2200)

Diego Mastrantonio refleja a esos empresarios que soñaron alguna vez con ser bodegueros, y lograron hacerlo realidad. A partir de un blend que nace en el viñedo; porque las uvas Malbec (83%) y Petit Verdot (17%) se cosechan juntas en su punto óptimo estado de madurez y co-fermentan en bodega; logra su vino ícono desde 2015. En esta añada se nota mucho la expresión del Malbec y del lugar, con toques exóticos aportados por el Petit Verdot. Es un tinto con fuerza y un carácter de frutas negras y especias, con dejos herbales. De aromas equilibrados y expresivos, paladar franco y fresco, también profundo y consistente por sus texturas firmes. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 93

Pintom 2018

Canopus, El Cepillo, Valle de Uco ($3500)

Después de diez años, Gabriel Dvoskin se recibió de pequeño gran productor, y su historia puede servir para inspirar a muchos. A partir de una viña propia de 10 hectáreas, cada vez más estudiadas, nace este auténtico Pinot Noir de terroir. Ofrece aromas intensos y bien terrosos, pero apoyados en las cerezas negras, con toques de madurez y especias. Su aspecto algo túrbido delata su falta de filtrado. De paladar franco y mordiente, pero a la vez amable y con un carácter natural. También con cierta madurez en el final de boca, y un leve agarre seco que aporta firmeza a sus texturas. Es muy viejomundista en su concepción. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 93

MEG 2017

Escorihuela Gascón, Valle de Uco, Mendoza ($2500)

Combinando Malbec de Finca Cordón El Cepillo, con un Cabernet Sauvignon de San José de Tupungato, Matías Ciciani ha logrado un gran exponente de vino argentino. Demostrando el trabajo que en poco tiempo ha logrado imponer este joven enólogo, con mucho futuro. Tinto de buena consistencia, sus aromas integrados deambulan entre lo classy y lo moderno. Muy actual en su concepción, con buena fruta fresca y leves dejos ahumados que hablan de una crianza sutil. Voluptuoso, con paso mordiente y potencial. Está el carácter del Cabernet Sauvignon en el final de boca y el del Malbec en el ataque, y esto lo hace muy atractivo. Beber entre 2019 y 2027.

Puntos: 93

Teho Grand Cru Les Velours Malbec 2015

Bodega Teho, La Consulta, Valle de Uco ($2400)

Inspirados en la Borgoña, Alejandro “Colo” Sejanovich y Jeff Mausbach, elaboran por separado vinos de parcelas que se expresan diferente en función a la composición del suelo. Así nació una trilogía, y de ellos este Malbec de suelos más arcillosos. Sus aromas son integrados y generosos, y la vez austeros para ser Malbec. Es vertical, con más frescura y fruta fresca, hay vivacidad y llena la boca con cierta delicadeza. La madera se va integrando y se combina con algo especiado. Sus taninos granulosos finos aportan estructura y resaltan su carácter propio. Se lo nota bien definido como vino de lugar más allá de la madurez de la fruta. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 93

Mendel Unus 2016

Mendel, Mendoza ($1600)

Ya todos saben que esta cosecha fue distinta, por húmeda y muy lluviosa; sobre todo en Altamira. Pero la sanidad de las uvas fue muy buena gracias al frío del final de ciclo. Y a Roberto de la Mota le gustaron mucho los vinos que salieron. Su expertise le permitió lograr este gran blend respetando, no solo el carácter del viñedo sino también los efectos de la añada. De aromas equilibrados y buen volumen, con la frescura que llena la boca. Hay una expresión frutal propia, y la madera se siente mucho mejor integrada. Con músculo, fluidez y cierto agarre, y muy buen potencial. Es quizá desde el 2004 (el primero) el Unus más expresivo. Beber entre 2019 y 2023.

Puntos: 93

Fabre Montmayou Grand Vin 2016

Bodega Fabre Montmayou, Vistalba, Luján de Cuyo ($3000)

Creado a fines de los 90´y desde siempre elaborado con uvas provenientes de un viñedo plantado en 1908, sigue siendo un gran exponente de la primera zona. Partida limitada de 9.500 botellas, es un blend a base de Malbec, con toques de Cabernet Sauvignon y Merlot, creado por el enólogo Juan Bruzzone y Hervé Joyaux Fabre. Se nota la frescura y vivacidad de la cosecha ya al respirarlo, muy apoyado en las frutas negras, con dejos especiados y la crianza que acompaña. De buen volumen, fresco y con buen agarre. Y si bien se lo siente más moderno, mantiene su personalidad y estilo bordelés, con toques argentinos. Beber entre 2019 y 2023.

Puntos: 93

Luigi Bosca Los Miradores Malbec 2017

Luigi Bosca, Tunuyán, Valle de Uco ($1100)

La continua evolución de este vino demuestra los cambios que se están llevando a cabo en la bodega de la mano del enólogo Pablo Cúneo. Porque no solo es un Malbec importante, sino un vino nacido en un viñedo privilegiado plantado por el Ing. Alberto Arizu. De aromas integrados, con algo de frutas rojas y especias dulces. Buena fluidez, y trago mordiente, paladar franco y voluptuoso, se lo siente muy joven aún. Sin dudas habla del Valle de Uco y de la variedad, con las notas de crianza que empiezan a amalgamarse con la fruta. De trago profundo, tiene todo para ganar equilibrio y complejidad con la guarda. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 93

Gran Enemigo Cabernet Franc Gualtallary 2015

Bodega Aleanna, Gualtallary, Valle de Uco ($2000)

Desde que en 2013 alcanzó los 100 puntos en The Wine Advocate, todas las miradas (y las copas) apuntan a este Cabernet Franc. Sin dudas, Alejandro Vigil logró poner al varietal en un lugar de privilegio. Con su propuesta ampliada en base a diferentes terruños, y el de Gualtallary sigue siendo el más definido. Sus aromas son intensos y expresivos, solo necesitan abrirse en la copa. De paladar compacto y refrescante, también vivaz y equilibrado. Hay fuerza con expresión, pero su paso es amable y profundo, y lentamente las notas de crianza se van integrando. Un vino que aún tiene mucho camino por recorrer, y terruños por consagrar. Beber entre 2019 y 2025.

Puntos: 93

Casa Petrini Imán Malbec 2016

Casa Petrini, Tupungato, Valle de Uco ($3000)

La evolución del Malbec solo puede llegar gracias a la precisión, pero más que en bodega en los viñedos. En Casa Petrini descubrieron parcelas con suelos de rocas volcánicas con propiedades magnéticas, y de ahí surge esta etiqueta que rápidamente se convirtió en su vino ícono. De aromas delicados y austeros para ser Malbec, con buena fluidez, bastante vertical, pero a la vez elegante. Muy buena fluidez y texturas sedosas pero vibrantes, hay tipicidad inconfundible de variedad y de lugar. Llena la boca con gracia y definición. Una muestra de cómo el Malbec puede seguir dando pasos más allá de sus atributos conocidos. Beber entre 2019 y 2026.

Puntos: 93,5

La Linterna Malbec La Consulta 2013

Bemberg Estate, La Consulta, Valle de Uco ($4800)
El desafió de Daniel Pi y su equipo es elaborar el mejor vino posible en cada una de las etiquetas de este flamante emprendimiento, y para ello recurrieron a vinos de micro terroir seleccionados. Acá hay un buen carácter frutal y floral con tipicidad, cuerpo y fluidez, notas de frutas negras y especias, con cierta madurez y la madera muy bien integrada. Se siente músculo con frescura, y la potencia del terruño en el final de boca. De texturas modernas y paladar franco y profundo. Es un tinto completo y con muy buen potencial. Es la primera vez que la familia decide poner su apellido en uno de sus negocios; por algo será. Beber entre 2019 y 2023.

Puntos: 93,5

Salentein Gran Valle de Uco 2015

Bodega Salentein, Valle de Uco ($3600)

Fue un gran desafío para José “Pepe” Galante crear este vino, porque fue la primera vez que Mijndert Pon; fundador de la bodega; aceptaba firmar una etiqueta. Lamentablemente falleció antes del lanzamiento, pero el legado de un blend icónico del Valle de Uco quedó, y fue creciendo. Y en una vertical reciente (2011, 2012, 2013, 2015 y 2016, aún en bodega) quedó demostrada su estirpe. De aromas integrados y jóvenes, elegantes y expresivos, a frutas de baya y especias, propias del Malbec (83%). De buen volumen y fluidez, paladar franco y fresco, y un final equilibrado con leves ahumados. Tiene potencial de complejidad. Beber entre 2019 y 2024.

Puntos: 93,5

Catena Zapata Malbec Argentino 2015

Catena Zapata, Mendoza ($5750)

Hace tiempo que varias etiquetas de Catena lideran la evolución del vino argentino, con el Malbec como insignia. Y este vino potenció la imagen del emblema nacional en el mundo, y por suerte ahora también acá. Alejandro Vigil lo elabora con la intención de mostrar lo mejor del cepaje. Con uvas de dos tradicionales viñedos (La Consulta y Lunlunta) logra un Malbec completo y de excepción. De aromas expresivos y buen cuerpo, su paso sucroso y fresco resalta la fruta roja y las especias, y sus texturas vibrantes le aportan carácter. Cuenta una historia por fuera (etiqueta), pero también por dentro, porque se lo siente moderno y clásico a la vez. Beber entre 2019 y 2023.

Puntos: 93,5

Zuccardi Piedra Infinita 2016

Zuccardi Valle de Uco, Paraje Altamira ($6450)

En el último informe sobre Argentina para The Wine Advocate, Luis Gutiérrez otorgó 100 puntos únicamente a este vino. Merecido premio a la búsqueda y al trabajo de Sebastián Zuccardi y equipo. Sin dudas, es un vino muy especial, y por suerte es Malbec. Elaborado con uvas de parcelas muy estudiadas, y con suelos más calcáreos, que explican su carácter distintivo desde su debut cosecha 2012. En 2016, sus aromas no son tan expresivos, más bien delicados. Hay buena fluidez, con frescura precisa y cierta consistencia en su paso por boca, aunque sin tanta profundidad de sabores. Es mordiente y vertical, y muy apoyado en sus texturas. Beber entre 2019 y 2024.

Puntos: 94

Cheval des Andes 2016

Cheval des Andes, Mendoza ($5000)

Malbec y el Cabernet Sauvignon (50/50) que, apuesta a ser elegante, fresco y con potencial de guarda. Sus aromas son delicados e integrados, y hablan de frutas negras y especias, con leves dejos herbales, además de las sutiles notas de crianza. De entrada, fresca, con buena fluidez (propia de la cosecha) pero trago consistente. Hay delicadeza con expresión y cierta tensión fresca. Flota en la boca, y empieza a asomar su personalidad; un vino más preciso y definido. Desde el 1999 (solo no hubo en 2000), esta es la mejor cosecha de este “doble” grand cru nacional (porque las uvas provienen de Las Compuertas; viñedo de 1929; y Altamira). Beber entre 2019 y 2026.

Puntos: 95

Sobre El Autor

Hace 22 años degusté un vino por primera vez y supe que querría hacer de mi vida profesional. Compartir mi pasión; por eso me dediqué a comunicar el vino. Más de 30.000 vinos degustados y 20.000 publicados, más de 100 revistas editadas y miles de notas. Siete años en TV, cuatro en radio y seis en la web. Más de 20 exposiciones de vino organizadas y más de 30 concursos internacionales como jurado, además de muchos viajes a zonas vitivinícolas del mundo. Todo esto, simplemente me ayuda a conocer más, para poder compartirlo mejor.