Más que vinos de autor, vinos de diseño Fabricio Portelli 24/09/2015 Notas, Vinos Notas 3211 Como muchas bodegas de principio de Siglo XXI, Casarena fue creada por emprendedores extranjeros para elaborar vinos de calidad y a precios razonables, para exportarlos. Y como pocas ha logrado muchos de sus objetivos, a pesar de la coyuntura del país. Muchos condimentos en su receta, que no es secreta, pero sí consistente; basada en la dinámica de sus cambios hasta conseguir los resultados esperados. Todo empezó en una bodega de1937, en el corazón de Perdriel, Luján de Cuyo. La finca que la rodea, se bautizó como Jumilla´s Vineyard; un viñedo plantado en 1995, totalmente con Malbec. El mismo año (2008) que se decidió reciclar y tecnificar la bodega, se plantó la finca Lauren´s, en su mayoría con Malbec y Cabernet Sauvignon, pero también con algo de Cabernet Franc y Petit Verdot, entre otras. Pero se sabe que en el vino la uva es lo más importante, y siempre que se pueda combinar el pasado y el presente, el futuro vínico será mejor. Por eso adquirieron Owen´s, un viñedo plantado en 1930, también en Agrelo. Aquí, la mayoría de las vides de baja densidad, son Cabernet Sauvignon. Y el más reciente plantado en 2012, a puro Malbec y también de Agrelo; denominado Naoki´s. La denominación de las fincas es uno de los secretos mejor guardado de la bodega. Si bien los objetivos siempre fueron los mimos, hubo grandes cambios en la bodega. Porque para ser protagonistas del vino argentino en pleno auge, y a la vez querer ser referentes de una zona tradicional, no era tarea fácil. Sobre todo por la irrupción del Valle de Uco que acaparó todas las miradas de la prensa especializada internacional y de los principales mercados de consumo. Ahí se vio que la visión y la misión de la bodega estaban bien claras. Y los cambios necesarios, llegaron fundamentalmente de la mano de dos personajes de la industria, jóvenes pero consagrados. El asesor en la viña y elaboración es Alejandro Sejanovich (el Colo); alguien que conoce mucho la zona donde Casarena eligió afincarse. El know how del reconocido ing. agrónomo; hoy devenido también en wine maker; fue clave para poder entender el potencial de la zona y sacarle el jugo, en pos de concebir vinos modernos que estuvieran a la altura de los mejores exponentes nacionales. Y si bien el terroir es lo más importante en un vino, la dependencia del hombre sigue siendo fundamental. Y hacía falta un enólogo que compartiera la visión, pero que también contara con la experiencia necesaria para embarcarse en este proyecto cargado de pretensiones. Y así fue como Bernardo Bossi Bonilla (Berni), que trabajó junto al Colo en Catena Zapata varios años, llegó a Casarena. Ambos le dieron un giro, tanto a la viticultura como a la enología con la cual el proyecto había comenzado. Anticipándose, de alguna manera, al estilo actual de los vinos argentinos. Más frescos y tomables, pero sin perder concentración de aromas y sabores. Lo cual ha llevado a la bodega a posicionarse muy bien en los mercados más exigentes, con casi todos sus vinos. Hoy, Casarena es una bodega pequeña pero con movimiento de mediana, capaz de cubrir varios segmentos de vino. Desde etiquetas y propuestas innovadoras como son su línea 505 y su Bag in Box, pasando por vinos consistentes como los Casarena y Rama Negra, hasta darse el lujo de tener varios exponentes de muy alta gama. Y todo esto, en muy pocos años. Puede parecer sorprendente que recién ahora se animaran a realizar un evento de presentación en el país. Sin embargo, es una muestra de la confianza que han ganado, y de la seguridad de saber que ya están en el camino correcto. Vinos de diseño En pleno dominio; al menos mediático; de los vinos mendocinos de altura, con todas las subregiones del Valle de Uco a la cabeza, que surja un proyecto nuevo y moderno, con potencial y enfocado sólo en Luján de Cuyo, es interesante. Claro que no son los únicos, pero sí deben ser de los proyectos más recientes, los primeros en prescindir de las uvas de Uco en pos de posicionar sus propios terruños. Ellos se denominan Luján de Cuyo. Un gran desafío para Berni Bossi, el flamante enólogo de la casa desde 2011. Acá, el joven enólogo tiene por delante la difícil misión de ir agregando complejidad a sus vinos, a medida que el éxito golpea a sus puertas. Porque si hoy en la bodega se hacen 23 vinos, es porque gustan, y la apuesta sigue subiendo cosecha tras cosecha. Eso explica que a poco de salir los Single Vineyards, se convirtió en una línea con las incorporaciones ruidosas del Petit Verdot y del Cabernet Franc. Pero no sólo eso, sino que nació DNA, una expresión más abarcativa, pero a la vez con una mayor precisión. Porque se trata de blends de uvas de diferentes fincas pero que comparten el mismo ADN (Bertona y Blanco principalmente).Y por último, y a pedido del público, el Icono; para dejar en claro que siempre se puede ir más allá. En el vino el tiempo debería ser el mejor aliado, más allá de las exigencias del mercado. Y eso Berni Bossi lo tiene claro. Sin embargo, sabe que esta es su gran oportunidad. El público se los está pidiendo, y él no debe quedarse detrás de escena, sino que debe salir nuevamente al escenario, tocar el bis y romperla. Condiciones le sobran, según los colegas que más lo conocen. No obstante, la tiene difícil. Porque manejar muchos vinos de alta gama, de una misma zona y poder diferenciarlos cualitativamente a ese nivel, es un reto para cualquier enólogo. El secreto está en la viña. Jumilla´s Vineyard en Perdriel, donde está la bodega, está a sólo 500 metros del lecho del Río Mendoza, y es muy diferente a las tres de Agrelo. Y a pesar de quedar en una misma línea, allí es donde los suelos más cambian y terminan impactando notoriamente en los vinos, según el enólogo. Quizás un sello distintivo de esta finca, según resalta el Colo Sejanovich, es que no están plantadas con clones comerciales. Sino que todas las vides son hijas de selecciones masales que él mismo produjo, todos de fincas con historia. Como un Malbec de Panquehua que está presente en las cuatro fincas de Casarena. El lote Bertona, también está plantado con una selección de dicho viñedo con un Cabernet Sauvignon que data de 1937. En Perdriel, los suelos son más cortos, con cantos rodados a 30cm de la superficie y con presencia de calcáreo. Lo que resalta la mineralidad de sus vinos (según el enólogo), sin que Bernardo Bossi le haya encontrado una explicación científica al respecto. Lo que si han descubierto es que sus vinos de Perdriel son más admirados por los paladares europeos, mientras que en los Estados Unidos gustan más de Agrelo. Creo que Bernardo Bossi está en un punto de inflexión con sus vinos. El Mercado lo obliga a ir más rápido que el viñedo. Y si bien sabe que está en el camino correcto, debe recurrir a su intelecto en bodega para terminar de moldear sus vinos. Y como si fueran vinos de diseño, en los que a la complejidad potencial del viñedo se busca resaltarla hoy en la botella. Las intenciones se notan en cada uno de los vinos de Alta Gama de Casarena, y eso la convierte en uno de los emprendimientos (relativamente) nuevos, de mayor impacto. Hay que darles tiempo, a los vinos y al enólogo. Porque la viña está ahí, expresándose con todas sus complejidades. Pero interpretarla y sacarle el máximo provecho, lleva su tiempo. A veces, las exigencias de obtener puntajes que promuevan más las ventas, llevan a alterar el mensaje de las botellas. Por eso creo que el camino de Casarena no está por el lado de ese flamante Syrah DNA 2013, mordiente y vivaz, sino más bien por el lado de sus sorprendentes Cabernet Sauvignon. Siendo el DNA 2011 uno de los mejores exponentes varietales, y uno de los mejores vinos del país. Notas de Cata (por orden de calificación) DNA Cabernet Sauvignon 2011 Bodega Casarena, Luján de Cuyo, Mendoza $ – $$ – $$$ – $$$$ Sus aromas son muy austeros, casi que no se nota que es un Cabernet Sauvignon, pero sí se notan las intenciones. De ataque fresco y fluido, y paso consistente; hay concentración con fluidez y agarre. Tiene mucho potencial, y necesita más botella porque ahora se muestra algo compacto. Pero decantado al abrirse, se expresa mejor. Hay músculo contorneado. Es largo y filoso, también franco y mas expresivo en boca que en nariz. Hay un gran Cabernet Sauvignon acá, sin rastros de madera, a pesar de sus doce meses en un mix de barricas de roble. Beber entre 2015 y 2025. Puntos: 94 Owen´s Single Vineyard Cabernet Sauvignon 2012 Bodega Casarena, Agrelo, Luján de Cuyo, Mendoza $ – $$ – $$$ -$$$$ (Sep2015 $325) Nacido en un parral de más de 85 años, con una producción natural muy baja por planta, y de bayas pequeñas. De aromas y expresiones elegantes, con cierta tipicidad. Buena fluidez, con volumen, equilibrio, y con una tensión muy bien interpretada. Austero como buen Cabernet Sauvignon y la frescura muy delicada. No tiene tanta profundidad pero sí buen ataque, con el cuerpo equilibrado. Aún no hay complejidad pero tiene el mejor potencial de los SV. Este es un vino de texturas es largo, completo, y con todo para ganar. Puntos: 93 Casarena Ícono 2011 Bodega Casarena, Luján de Cuyo, Mendoza $ – $$ – $$$ – $$$$ Complejo blend que comparte el espíritu de los DNA, pero que no es una mezcla de ambos. Con Malbec (40%), Cabernet Sauvignon (60%) 2011, y touch de Petit Verdot, con una crianza de 12 a 14 meses de barricas. De aromas integrados, con buena fluidez y cuerpo. Sus taninos algo suaves para el nivel de vino, y en su carácter habla más la fruta madura con frescura. Es compacto con fluidez, y no es muy expresivo. Un vino apoyado en la fruta, con buena carnosidad pero sin tanta profundidad, y su textura es delicada. Habrá que ver como evoluciona este blend a concebido a partir de selecciones masales. Beber entre 2015 y 2018. Puntos: 91 DNA Malbec 2011 Bodega Casarena, Luján de Cuyo, Mendoza $ – $$ – $$$ – $$$$ De aromas compactos, poco expresivos. Su paladar es apretado y firme, pero no agresivo sino más bien domado por el tiempo. Presenta buen volumen y un agradable equilibrio entre su carnosidad y sus texturas. Fluido y con agarre, este resulta un vino mas de texturas; y hasta de terroir; que de fruta (comparando con el SV). Hay buen potencial, y seguramente con un par de años de estiba ganará la complejidad esperada. Beber entre 2015 y 2020. Puntos: 91 Lauren´s Single Vineyard Malbec 2012 Bodega Casarena, Agrelo, Luján de Cuyo, Mendoza $ – $$ – $$$ -$$$$ (Sep2015 $325) De aromas algo densos y austeros, poco expresivos pero equilibrados. En boca se abre, con mucha fruta roja y viva, y buen balance de cuerpo. Es muy moderno y fresco, causa de buen impacto. Hay tensión en su trago, con taninos finos y algo filosos. Hay fluidez con cuerpo e intención, con un final muy frutado. Llega mas lejos que el Jumillas, con un estilo más claro y moderno. Su personalidad, por ahora, es bien frutal; hay que ver si con la estiba surge el carácter del terroir. Potencial tiene. Beber entre 2015 y 2019. Puntos: 91 Lauren´s Single Vineyard Cabernet Franc 2012 Bodega Casarena, Agrelo, Luján de Cuyo, Mendoza $ – $$ – $$$ -$$$$ De aromas densos, similares a los de su par Malbec, como si ambos respondiesen a la viña. Con dejos suaves, casi elegantes, de pimientos verdes. De buen cuerpo y paladar franco, pero las notas verdes dominan. Con agarre y cierta concentración, pero también con fluidez. Sus taninos son muy finos, con mejor agarre que el Malbec. De ataque refrescante, y verde en el centro de boca. Es el que mas impacto tiene de los SV, pero ese perfume final tan típico del varietal, lo simplifica en algún punto. Algo que seguramente responda a la juventud de las plantas (6,7 y 8 años). Este vino se vende exclusivamente en Gaucho de Londres a 80 Libras. Puntos: 90 Lauren´s Single Vineyard Petit Verdot 2012 Bodega Casarena, Agrelo, Luján de Cuyo, Mendoza $ – $$ – $$$ -$$$$ Aromas de buena fruta, con leves toques anisados, algo maduro y de fruta azul, con algo de tierra mojada y fruta madura, pero con frescura. Austero y de buen ataque, con mucho agarre al principio y buen volumen, pero no tiene la carnosidad suficiente para sostener el impacto y su cálido final. Con buena frescura y ciertos dejos herbales, es mordiente pero de cuerpo suelto. No tiene la personalidad propia de sus pares, mas allá de sus diferencias varietales. Este vino se vende exclusivamente en Gaucho de Londres a 80 Libras. Puntos: 90 Jumilla´s Single Vineyard Malbec 2012 Bodega Casarena, Perdriel, Luján de Cuyo, Mendoza $ – $$ – $$$ -$$$$ (Sep2015 $325) Aromas de buena intensidad y bastante directos, con buena tipicidad apoyada en la fruta. En boca es bien fluido y franco, con agradable expresión y taninos incipientes. Voluptuoso pero sin gran cuerpo, de carácter más evidente, especiado y con final levemente tostado, que se mezcla con las notas de frutas rojas. Es en el que menos se nota el carácter Single Vineyard. Con cierta calidez y algo de agarre, tiene profundidad pero muy apoyado en la fruta. Muy agradable de beber pero sin complejidad. Hay que ver cual es el potencial. Beber entre 2015 y 2017. Puntos: 89