Revolucionario el chiquitín Fabricio Portelli 24/05/2016 Notas, Vinos Notas 1619 YACU es el primer vino en Portion Pack que sale a conquistar al consumidor con un buen vino. Y eso lo convierte en el vino más innovador de los últimos años. Porque hasta ahora, todos los avances en la materia venían dentro de las botellas. Primero fueron los varietales y sus variantes (bi, tri, etc.). Luego fueron las variedades alternativas, como Bonarda, Cabernet Franc, Petit Verdot, Pinot Gris o Sauvignon Blanc, por nombrar a las más exitosas. Paralelamente a ello comenzó el auge de las zonas. Primero Valle de Uco, y de repente todas sus sub regiones, etc, etc. Si a esto le sumamos la gran evolución de los vinos argentinos de calidad en general, que llegó de la mano de un mejor conocimiento (por estudios) de los suelos, manejo de riego y canopia en la viña. Y nuevas alternativas de elaboración en bodega, como fermentación en vasijas de cemento de diversos formatos, y cada vez una mayor utilización de barricas de roble usadas, entre otras. Todos estos factores relevantes impactaron en la calidad de los vinos. Pero en su mayoría refieren a sutilezas que para la mayoría silenciosa pasan desapercibidas. Porque en definitiva el buen vino es aquel que gusta. Y si bien son los detalles los que terminan diferenciando a un gran vino de los demás, son pocos los consumidores que están dispuestos a percibirlos y a pagar por ellos. Ahora bien, toda esta verdadera revolución que vive el vino argentino desde que comenzó el milenio no ha sido suficiente para revertir la caída del consumo per cápita. En otras palabras, tenemos mejores vinos que nunca pero tomamos cada vez menos. Algún estadista denunciará que la caída se debe más a los vinos de calidad básica que a los buenos. Y es cierto. Pero cómo puede ser que de no tomar cerveza hayamos pasado a beber casi 50 litros per cápita anuales, más del doble que de vinos, en el momento de mayor auge vínico. Respuestas hay muchas posibles, pero una es clave: mientras todas las innovaciones vengan embotelladas, será difícil sacudir al mercado. Sin entrar en la polémica de los precios, cuánto más vino puede tomar un enófilo porque lancen vinos más elegantes y sutiles, con más complejidades. No mucho. Porque los hábitos de cada uno ya están marcados. A lo sumo se pueden conquistar nuevos consumidores. Pero en eso andan las grandes bodegas hace tiempo, a la caza de los paladares más jóvenes con vinos modernos y atrevidos, y con mensajes directos. Pero nada de esto ha posibilitado un cambio de tendencia. Y ahí es donde YACU aporta su impronta revolucionaria, como en su momento lo hicieron los espumantes “baby” con sus botellitas 187 en la noche. Pero en este caso el potencial es mayor. Porque son muchos los que dejan de disfrutar del vino en diversos momentos por no tener con quién compartirlo, o por no querer desperdiciar el sobrante en las botellas, a sabiendas que el vino abierto sólo puede desmejorar. Tener a mano un buen vino en casa y en la medida justa, permite disfrutar de una copa en cualquier momento sin preocupaciones. Sobre todo durante la semana en que la vorágine de la cotidianeidad manda. Y quizás no sean todos los días de Lunes a Viernes, pero seguro que hay ocasiones caseras que tomarían otro color. La carne al horno con papas de los lunes, el típico guiso de arroz de mamá en invierno, los fideos con manteca salvadores para salir del paso, o incluso los delivery improvisados de pizza y empanadas para salir del paso. Todas oportunidades cotidianas que sin dudas mejoran con una copa de buen vino. Y el universo de momentos se multiplica naturalmente. Llegar a casa y ponerse a cocinar, relajarse en el sillón haciendo zapping, sentarse en el balcón a tomar aire al final del día, terminar en la compu de casa lo que quedó pendiente en la oficina; todo, pero todo puede quedar mejor con una copa de vino. Entonces, si todos los que suelen quedarse con ganas de tomar un buen vino por no tener con quien compartirlo o no querer desperdiciarlo, tienen a mano un rico vino y en la porción justa, el consumo debería incrementarse. Encima, ni las botellas ni los vinos de alta gama deberían preocuparse, sino por el contrario, alentar al Portion Pack. Porque su incursión en el mercado no supone el reemplazo de las botellas, porque ellas siempre serán las protagonistas de los momentos del vino, cuando hay invitados o se va de visita a lo de un amigo. Además, el límite cualitativo natural de esta categoría sería el vino Reserva. De ahí en más, el precio del vino justifica la ceremonia del descorche. Como es de esperar, toda idea exitosa es seguida por un aluvión. Y ojalá que así sea, y que los amantes del vino puedan tener una góndola de la cual elegir los varietales, blends, blancos, tintos y rosados que más les agraden para tener siempre en casa, ya sea en la heladera o en la alacena, listos para servir en copa. En Italia se venden 60 millones de vinos en porción al año. Es decir que YACU no inventó nada, pero sí fue el que se animó a romper con el estigma del “vino en cartón” en la Argentina. YACU no es un “mini tetra”, es un buen vino en la porción justa. Y si bien el envase mantiene todas sus cualidades originales (ecológico, 100% reciclable, práctico, etc.), demuestra una vez más ser el mejor contenedor para vinos. Porque no deja pasar el aire ni la luz, contiene mejor la temperatura interior, y si se cae no se rompe. Cosas que las botellitas no logran, y quizás por eso que no han conquistado un lugar en casa. YACU llega al mercado de la mano de El Carmen, los productores de Citric, el jugo que revolucionó el mercado. El YACU Torrontés 2015 (verde), un Malbec 2015 (rojo) y un blend de Malbec 2014 (negro), todos elaborados por la joven enóloga cafayateña Tania Höy, quien sigue de cerca todo el proceso desde la viña hasta el fraccionamiento, y que ya tiene listos los próximos vinos que llegarán al mercado con la primavera. Los YACU ya están a la venta en COTO y en otros supermercados y auto servicios a un precio sugerido entre $26 y $29,90 cada uno. La familia Padilla, propietaria de El Carmen, había incursionado en viñas hace tiempo y elaboraban un vino para la ellos. Solo fue cuestión de juntar su visión estratégica y su gusto por el buen vino para dar vida a este vino revolucionario. Algo que las grandes bodegas no se animaron a hacer aún, quizás por le peso de la tradición. Aunque seguramente en breve saldrán corriendo detrás de YACU. Pero esa ya será otra revolución. Tania Höy, enóloga Yacu presentando los vinos en el lanzamiento YACU MALBEC 2015 Variedad: 100% Malbec Viñedos: Santa María. Valles Calchaquíes. Noroeste Argentino Riego: por goteo Cosecha: 1º semana de Abril. Manual, en cajas de 18 kg. Método de elaboración: Clásico, con elevación de la temperatura al inicio de la fermentación para obtener toda la riqueza de color y aromas propia de las uvas que dieron su origen. Descripción del enólogo: Color violeta brillante atractivo. Aromas a violetas y guindas. En boca presenta un muy buen balance de acidez-tanicidad. Fresco e invita a seguir tomándolo. Ideal para beber sólo o acompañar con pizzas, empanadas, hamburguesas y milanesas. Alcohol: 13,50% Precio: $26,90 YACU MALBEC 2014 – BLEND Variedad: 100% Malbec Viñedos: Diferentes zonas de los Valles de Altura argentinos (Valles Calchaquíes y Valle de Uco) Método de elaboración: Se utilizó el concepto de ¨cross field blending¨. Se utilizaron uvas de distintos Valles de Altura con la intensión de reflejar el carácter de la zona en cada copa. Se realizó maceración pre fermentativa en frío y sangrado al 20% para extraer al máximo las notas frutales maduras y lograr el color intenso que lo caracteriza. Descripción del enólogo: Alta concentración de color, con marcados destellos violetas, típicos de los Valles de Altura. En nariz destacan los frutos rojos maduros y notas especiadas. En boca elegante y persistente, que invita a seguir tomándolo. Es un Malbec carnoso y de buen cuerpo, de aromas expresivos y paladar profundo. Sus texturas se hacen sentir, al igual que su tipicidad. Por su carácter es ideal para acompañar un plato de quesos, carnes asadas o pastas. Alcohol: 13,80% Precio: $29,90 YACU TORRONTÉS 2015 Variedad: 100% Torrontés Viñedos: Santa María. Valles Calchaquíes. Noroeste Argentino Riego: por goteo Método de elaboración: Fermentación a bajas temperaturas para obtener aromas finos y puros. Se utilizaron levaduras seleccionadas. Al final de fermentación, se realizó un levantamiento de lías por 6 días para tener mayor volumen y glicerina en boca. Se buscó un vino joven, sin paso por roble. Descripción del enólogo: Tonalidades plateadas y verdes que le dan una sensación de frescura. Sus aromas son intensos y fragantes, como buen exponente varietal de la zona. De paladar fresco y ágil, con buen cuerpo y sabores típicos. Expresión genuina de Cafayate. Ideal para beber por copa o acompañar empanadas, sushi o ensaladas varias. Se recomienda consumir entre 7-9ºC. Alcohol: 13,50% Precio: $26,90