Un hacedor muy contento con sus vinos Fabricio Portelli 31/01/2017 Notas, Vinos Notas 2628 Federico Schneidewind vive en Rosario, con su familia que empieza a ser numerosa, y rodeado de muchos amigos. Sin embargo, una parte de su corazón está en Mendoza, o mejor dicho en el vino. Porque desde hace tres años se ha propuesto ponerse del otro lado del mostrador y dejar de ser un protagonista privilegiado (como comunicador) para pasar a ser protagonista. Si bien esta es su segunda cosecha en el mercado, hay una que quedó en el medio, deambulando entre las buenas intenciones y las realidades. Es que no es fácil hacer vino a la distancia, por más pasión que se le ponga. Confuso Wines (o Contento Wines en un futuro próximo) arrancó como un proyecto personal de aprendizaje de un verdadero enófilo. Las intenciones de Federico son tan serias como sus vinos; “hacer vinos distintos y preferentemente únicos, ese es mi ADN vínico” asegura el joven hacedor. Luego de analizar toda la info recolectado de años se lanzó en busca de lugares y personas que comprendieran su visión y pudieran traducir sus ganas en vinos. La primera cosecha fue en 2014, con un vino muy novedoso por donde se lo tome. Porque el Confuso 2014 fue un Cabernet Franc cofermentado con Sauvignon Blanc, algo muy difícil de lograr teniendo en cuenta los distintos puntos de madurez de dichas cepas y en Alto Gualtallary. Este vino además de ser el ícono es en el que más participó activamente Federico, y por eso “es especial” dice. También nacieron Conjunto, un Bonarda de Tupungato elaborado junto al joven enólogo Cristian Morelli, y Contento, un espumante a base de Pinot Noir. Y es justamente esta marca la que tiene todo para convertirse en línea. Es por eso que en la 2016 nace Contento Semillón, elaborado con uvas de Tupungato (un espaldero plantado en los noventa), y con una particularidad que va más allá de su aspecto velado. Son dos vinos que pueden convertirse en tres. Porque está el Contento 1, que es el vino gota. De solo 10 grados de alcohol y cosechado como los vinos base. El Contento 2 es el vino de prensa y es algo más escaso que el anterior (solo 550 botellas). Vienen juntos y entre ambos se puede armar el Contento 3, jugando con el carácter que puede aportar cada uno de los componentes. Y como el proyecto está en su etapa fundacional Federico se permite experimentar sin perder de vista su gran objetivo, concebir vinos únicos. Por eso en 2016 con uvas de un viejo parral de Tupungato creó su primer vino de mesa. Una Criolla cofermentada con algo de Moscatel y Pedro Jiménez (no más del 10%) mezcladas en la viña. Verdaderos Invisibles es su nombre, inspirado en un párrafo de Felipe Pigna (que hablaba de los muchos indocumentados que habitaron estas tierras) y en homenaje a tantas personas que hacen que las cosas sucedan pero que nadie reconoce. “También hay algo del Patito Feo, porque a la Criolla nadie la valora”, afirma Federico. No es un rosado ni tampoco un tinto, pero es un vino que evoca a los aromas y a la fluidez de los antiguos vinos de mesa, pero con frescura y texturas muy actuales. Y estoy seguro, por cómo es este vino y lo que transmite, que Miguel Brascó lo valoraría mucho y lo destacaría entre muchísimas otras nuevas etiquetas. Como su nombre lo indica, el Confuso 2016 no está definido aún. Puede ser un blend similar al originario, y si no pasará a ser un Conjunto Cabernet Franc ya que lo elaboró junto a Giuseppe Franceschini. Y si no, será un Contento Cabernet Franc, porque la idea es mantener el espíritu de cada vino ante todo. Confuso, el mejor vino posible, distinto y único. Conjunto, un vino elaborado de a dos, junto a un joven winemaker que sepa interpretar a Federico. Es más, hay proyectos para un Merlot de Entre Ríos y hasta un tinto elaborado en Altos de la Ballena (Uruguay). Y Contento la línea que pueda crecer y sustentar a los otros, siempre dejando lugar para sorpresas como Verdaderos Invisibles. La idea en 2017 es duplicar la producción, llegando a 7000 botellas. Lo más interesante acá es que se trata de vinos originales, con carácter y a precios muy tentadores. Vinos muy exclusivos más por su producción limitada y porque sólo se consiguen en pocos lugares (Mr. Wines, Lo de Joaquín, etc.). Los vinos de Federico Contento Pinot Noir Brut s/a Confuso Wines, Vista Flores, Valle de Uco $ – $$ – $$$ – $$$$ (Ene2017 $230) Agradable y con cierta madurez en su carácter. Las burbujas son relativamente finas pero sin mucha persistencia. Hay volumen con estructura y una acidez equilibrada. Llama la atención por su elegante aspecto rosé. Puntos: 87 Contento 1 Semillón 2016 (Gota) Confuso Wines, Tupungato, Valle de Uco $ – $$ – $$$ – $$$$ (Ene2017 $250) Es una producción de apenas 1050 botellas. Las uvas se cosecharon como para vino base de espumantes, por eso sólo alcanzó los 10 grados de alcohol. De aromas y sabores particulares, hay expresión pero es seca, más parecido a un vino de flor, tipo Jerez. Con algo de CO2, mordiente pero no filoso, hay algo de lo meloso de la variedad y un típico carácter austero. Interesante que la acidez explota en el final de boca, más allá de su tono frutal. Hay una intención, y su largo de boca se apoya en la textura, nada exagerado. Un blanco particular. Puntos: 90 Contento 2 Semillón 2016 (Prensa) Confuso Wines, Tupungato, Valle de Uco $ – $$ – $$$ – $$$$ (Ene2017 $240) Sus aromas son menos expresivos, pero austeros y en la misma línea que el vino gota (ver Contento 1). La frescura está más integrada y resulta con más cuerpo y a la vez con más fluidez. No es profundo y aparece la madurez de la fruta blanca, con lo mordiente muy sutil, y bien refrescante. Puntos: 88 Verdaderos Invisibles Criolla 2016 Confuso Wines, Tupungato, Valle de Uco $ – $$ – $$$ – $$$$ (Ene2017 $240) Su aspecto es vinoso pero muy atractivo porque no se parece a ningún otro tipo de vino, y tiene un brillo muy particular. De paladar seco y algo rústico, con cierto paso mordiente, y buena fuerza al final de boca. Hay algo oxidado en sus sabores cálidos y frutales. De trago liviano (10,2 de alcohol) y fresco, sin vueltas. Un auténtico vino para tomar muy seguido que bien se podría bautizar como “vino criollo”. Puntos: 89 Conjunto Bonarda 2014 Confuso Wines, Tupungato, Valle de Uco $ – $$ – $$$ – $$$$ (Ene2017 $280) Sus aromas ya se muestran maduros, con cierto carácter de Bonarda, pero hoy le gana la madera. Con una acidez marcada y taninos firmes, mantiene sus dejos salvajes originales. De final es seco y fresco, ideal para disfrutar al pie de la parrilla a la espera de las carnes asadas. Puntos: 87 Confuso 2014 Confuso Wines, Alto Gualtallary, Valle de Uco $ – $$ – $$$ – $$$$ (Ene2017 $480) Básicamente es un Cabernet Franc, de aromas integrados y poco expresivos. Paladar austero, de buena frescura y textura mordiente, con taninos finos e incipientes. De buen cuerpo pero paso fluido, mezcla de frescura y madurez. Hay fuerza y energía en este tinto joven que tiene vida pero su carácter es enigmático, confuso. Porque no se decide si es un tinto, un blanco, o los dos juntos. Beber entre 2017 y 2020. Puntos: 90