Trivento fue una de las primeras bodegas nacionales de capitales chilenos. Porque los visionarios de Concha y Toro vieron en el Malbec argentino un gran potencial, y decidieron rápidamente instalarse del otro lado de la Cordillera; como sucedería con muchos otras bodegas transandinas.

Sin embargo, en lugar de tirarle encima todo el apoyo del “grupo bodeguero más importante de la región”, decidieron que Trivento se haga su camino. Es cierto que en algunos mercados de exportación hubo sinergia, pero en realidad el Malbec, y sobre todo el Golden Reserve, le permitió a esta moderna bodega andar su propio rumbo. Y recién después de veinte años, Trivento comienza a ser un nombre propio para los argentinos. Porque hasta hace poco, todos los cañones apuntaban al mercado externo (80% del negocio). Pero hoy, el negocio está planteado en dos frentes (volumen y alta gama), con foco en la conquista del consumidor argentino.

Y es en la Alta Gama donde entra la línea Trivento Reserva, los Amado Sur, el Eólo que hace Victoria Prandina (arg), supervisada de cerca por Enrique Tirado (chi), y sobre todo los Golden Reserve. Una de las líneas de vinos argentinos con más éxito en el mundo, no solo en concursos sino también en ventas en los principales mercados de consumo.

Golden Reserve fue la primer apuesta de la bodega más allá del volumen, y nació de la mano del enólogo Federico Galdeano en el año 2000 con un Malbec, obviamente. Pero en 2002 ingresó a la bodega el joven Germán Di Césare, quién está al mando de todos los vinos de la casa. Él ya estaba allí cuando nacieron el Chardonnay y el Syrah en 2005. Y fue el responsable absoluto (con su equipo de enólogos y agrónomos) del Cabernet Sauvignon lanzado en 2012, del Franc desde 2013 y del flamante Pinot Noir de 2016.

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Trivento es una bodega que habla poco pero tiene mucho que decir. Y en 2017 están dispuestos a desembarcar en el mercado interno con sus Golden Reserve como bandera. Una línea muy completa, con un buen volumen y con exponentes que tienen su propia personalidad. Pero por sobre todas las cosas con vinos que dan mucho más de lo que piden. Hasta ahora Trivento es un nombre desconocido por muchos, y por ende sin prejuicios, y familiar para los conocedores; quienes generalmente lo  asocian con vinos masivos y sin carácter. Pues bien, hay una gran noticia para todos ellos. Porque la bodega ha definido que la Argentina es un mercado importante, por más que en Islandia se venda muy bien el Syrah; por ejemplo.

Eso significa que de ahora en más van a poder encontrar estos vinos más seguido en vinotecas y restaurantes seleccionados. Saben que a estos vinos el consumidor los tiene que encontrar fácilmente y que deben comunicarlos más; algo que le ha costado en estos veinte años a Trivento, al menos en el mercado interno.

Por otra parte su hacedor, Germán, se va a hacer famoso. Él ya lleva quince años en la empresa, una bodega que hoy tiene más de 1500 hectáreas de viñas, pero que para elaborar los Golden Reserve Black Series (ediciones limitadas) se nutre de paños propios de apenas 2 hectáreas, por ejemplo. Y Germán Di Césare no solo fue testigo de toda esa evolución sino que también fue protagonista. Hoy le toca empezar a cosechar acá (mechado interno) los frutos de tantos años de trabajo.

Una línea dorada

Es interesante escuchar a Germán decir que para elaborar los Golden Reserve no mete mucha mano porque su intención es reflejar el viñedo. Su foco está puesto en esta línea, sin descuidar los Reserva (el caballito de batalla de la compañía), y confiesa, “recién hoy podemos ponerle foco porque nunca dejamos de crecer y había que cumplir con la demanda”. Acaban de adquirir una finca en el corazón de Agrelo de 230 ha, para plantar con las variedades que mejor saben hacer, Malbec y Cabernet Sauvignon principalmente. Pero también tienen fincas en Altamira y en Tupungato (entre otras zonas), donde tienen mucho Syrah, otro de sus puntos fuertes. Mientras tanto, Germán está concentrado en hacer nuevos vinos que muestren más el lugar de donde provienen, y se muerde la lengua para no anticipar anda más.

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Los vinos del chico dorado

Evidentemente la línea ha madurado y ha ganado en muchos aspectos. Sobre todo pensando que se trata de una bodega en la que su mercado es el mundo. Es decir, que cada vez que lanza un vino tiene que pensar en todos por igual e intentar agradar a todos, siendo fieles al origen de cada varietal; siempre hablando de una línea como Golden Reserve.

Hay novedades. Luego del histórico Malbec, y los consagrados Chardonnay y Syrah, se consolida el Cabernet Sauvignon. Está al caer la segunda edición del Cabernet Franc, y se suma el flamante Pinot Noir 2016. Estos últimos son “Black Series”, ediciones limitadas porque provienen de fincas pequeñas (no más de 3000 litros), y dependiendo del clima, quizás habrá años que no se puedan elaborar por no alcanzar la calidad deseada por Germán. Algo que no peligra en los Golden Reserve estables (Malbec -450 mil botellas-, Cabernet Sauvignon – 50 mil botellas-, Chardonnay -10 mil botellas- y Syrah – 15 mil botellas-).

Pero las buenas noticias de la casa no terminan allí, al menos para los amantes del vino. Porque ya están vendiendo algunas de las joyas que elaboran del otro lado de Los Andes, como algo de Casillero del Diablo y Márquez de Casa y Concha, el Don Melchor, el Carmín de Peumo (el Carmenére más caro del mundo) y el afamado Almaviva. Aunque dejaron trascender que también llegarán en breve al país los Maycas (Chardonnay, Sauvignon Blanc, Syrah y Pinot Noir); joyas vínicas de clima oceánico de Chile. Con todos estos vinos la bodega podrá demostrar que la Argentina y Chile no son competidores sino que se complementan como un gran productor regional de vinos.

 

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Degustación de Golden Reserve

 

Golden Reserve Black Series Pinot Noir 2016

Bodega Trivento, San Pablo, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ ($400)

Buena fruta (frambuesa), franco, directo y con cierta delicadeza. Mucha tensión dada por la acidez, pero con una carácter más amable. Un tinto moderno y jugado (sobre todo para la línea) que se sale del molde. Hay algo casi verde pero bien frutal, con mucha fluidez y taninos incipientes. Se nota que le falta tiempo en botella para ganar elegancia y equilibrio de texturas, pero es un buen perfil de Pinot Noir moderno y con tipicidad, que va en busca de su propio estilo.

Puntos: 90

 

Golden Reserve Malbec 2014

Bodega Trivento, Vistalba, Luján de Cuyo

$ – $$ – $$$ – $$$$ ($350)

Agradable intensidad y perfil austero de Malbec, entre tradicional y actual, con buen cuerpo, carnoso y joven, con algo láctico propio de una buena barrica. Mantiene algo de fruta joven pero con cierta madurez, es carnoso y profundo, con buena textura y muy voluptuoso. La madera no es la protagonista, se mantiene el mismo estilo pero más refinado y con agradable frescura. Está pasando por un buen momento, incluso con cierta vivacidad que le asegura más potencial. Beber entre 2017 y 2020.

Puntos: 91

 

Golden Reserve Cabernet Sauvignon 2013

Bodega Trivento, Altamira, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ ($350)

Muy agradable carácter de Cabernet en nariz, aromas equilibrados de perfil más vegetal que frutal. Paladar amable y austero en su paso por boca, con taninos muy incipientes. Franco y largo, con una madurez bien sostenida por la frescura, y un final muy especiado. Mantiene una muy buena vivacidad a pesar de sus cuatro años. Es profundo y fresco, con agarre y mucho potencial; e incluso con buena complejidad por venir. Es típico y austero, pero a la vez expresivo y moderno. Un vino para hoy o para guardar con una excelente relación calidad-precio.

Puntos: 92

 

Golden Reserve Black Series Cabernet Franc 2013

Bodega Trivento, Altamira, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ ($400)

De buen ataque fresco, predomina el carácter de la fruta y la madera se siente muy integrada. Hay buena fluidez, es casi refrescante, de trago franco y vivaz, con taninos incipientes, y los herbales típicos con sabores cálidos al final. Es firme y seco, pero no por duro, ya que es amable. Pero por su poca extracción, resulta muy fluido. No despliega complejidad en nariz, pero si es intenso, y con potencia bien equilibrada por la frescura, y con algo de torrefacción de la crianza (16 meses en roble usado). Beber entre 2017 y 2020.

Puntos: 89,5

 

Golden Reserve Chardonnay 2015

Bodega Trivento, Tupungato, Valle de Uco

$ – $$ – $$$ – $$$$ ($350)

Un blanco que ha evolucionado al ritmo de la vitivinicultura nacional, porque se muestra más vertical y con su carácter frutal por delante de la crianza. Sus aromas son intensos y delicados, con buena fruta blanca (ananá y manzana verde). De ataque fresco y mordiente, paladar franco, con algo de pasto seco y leves tostados finales. De paso vibrante, y con potencial para ganar complejidad. Ideal para servir con pescados y frutos de mar.

Puntos: 89,5

 

Golden Reserve Syrah 2013

Bodega Trivento, Valle de Uco, Mendoza

$ – $$ – $$$ – $$$$ ($350)

De aromas intensos e integrados, con algo láctico y cálido de frutas maduras pero bien moderno, casi cárnico. De entrada fresca, es voluptuoso y con buena madera integrada, que se siente sobre todo por sus taninos finos. De trago cálido, con cierta potencia y buen músculo, pero equilibrado. Es redondo y con más vida por delante. Uno de los pocos exponentes nacionales del varietal que puede hablar por sí solo. Beber entre 2017 y 2021.

Puntos: 91